Cerca de una decena de vecinos de Gilet pusieron de manifiesto el jueves en el pleno la situación de indefensión que padecen tras los últimos robos sufridos en varias urbanizaciones y la falta de cobertura móvil que les impide dar la voz de alarma y comunicarse con las fuerzas de seguridad, un asunto que afecta a más de 1.000 residentes y seis urbanizaciones.
Los vecinos pidieron explicaciones al gobierno local sobre los pasos que se están dando para dar soluciones a ambos problemas completamente relacionados. Según explicaba uno de los afectados a Levante-EMV, «la falta de cobertura nos hace más vulnerables ante los delincuentes, por lo que exigimos medidas urgentes», comentaba preocupado.
Algunos de los que tomaron la palabra en el pleno son cercanos a cuerpos de seguridad y explicaron las graves consecuencias que pueden derivarse de la falta de cobertura. Explicaron el funcionamiento del 112. «Cuando llamas a este servicio de emergencia, la llamada se devuelve a quien la ha efectuado, pero si no hay cobertura, la comunicación no puede producirse y difícilmente se podría llegar a tiempo en caso de urgencia». Ponía el ejemplo de un robo en el que una llamada atendida puede llevar a interceptar a los ladrones, o en un incendio, los bomberos podrían marcan las pautas, vía teléfono, sobre lo que puede hacer la persona que lo sufre o sus familiares, pero si la llamada de contacto no se puede producir, la indefensión es clara».
Ademas de explicar el funcionamiento del 112 y exigir una antena de telefonía móvil, los vecinos también solicitaron un aumento de la plantilla de la Policía Local. Varios de los asistentes exponían que en la actualidad, solo hay dos policías que no pueden cubrir los dos turnos, el de mañana y el de tarde y lamentanban las continuas bajas de un tercero desde hace años, una situación que piden al alcalde que resuelva.
También lamentaron la escasa plantilla de Guardias Civiles en el cuartel de Estivella, dadas las bajas existentes, lo que imposibilita poder cubrir toda la Baronia, nueve pueblos, reivindicando un incremento de efectivos, aunque reconocen que desde los últimos robos, a mediados de septiembre se ha aumentado la presencia de éstos, pese a que los vecinos no la consideran demasiado efectiva. «Las patrullas son lo que garantizan la seguridad y no las hay, no un par de Guardia civiles».
Gestiones para pedir medios
En este caso, exigen mas reuniones con la Delegación de Gobierno hasta que ésta ponga soluciones. Encuentros que ya se han producido pero que no han sido productivas pese al refuerzo de la vigilancia en Gilet.
El Partido Popular también se ha unido a estas peticiones, y ha trasladado varias preguntas a la cámara alta, a través del senador Fernando de Rosa en relación al aumento de efectivos de la Guardia Civil y a la posible solución que puede dar el Ministerio de Fomento a la falta de cobertura de telefonía móvil.
Por su parte, el alcalde, Salva Costa se comprometió a estudiar la posibilidad de tener vigilancia nocturna, aunque ha reconocido a Levante-EMV que aumentar la plantilla de agentes locales es complicado.
En cuanto a la dotación de Guardias Civiles, explica que depende de la delegación de gobierno y recuerda que ya son dos las veces que se ha reunido con el subdelegado para abordar una solución a la falta de seguridad. En ambas, se le ha comunicado al mandatario de Gilet que no consta el incremento de delitos en el municipio , fruto de la ausencia de denuncias, por lo que invitaba al os vecinos a interponerlas en caso de robos y otro tipo de delitos.
Respecto a otras acciones que se están llevando a cabo, Costa anunciaba la instalación de cámaras de seguridad que contarán con una partida presupuestaria para 2o20, aunque los trámites para su instalación ya están avanzados, apuntaba a este medio.
Por último, hablaba de la instalación de la antena para dotar de cobertura móvil a varias urbanizaciones, un tema que está en manos de la conselleria que paralizó la obra al no disponer el ayuntamiento de permiso para ello y más cuando el cable discurría por la Calderona, hecho que llevó a dos vecinos a denunciarlo ante la Fiscalía de Medio Ambiente.
