Simuló que estaba interesado en comprar una bicicleta eléctrica valorada en unos 3.000 euros y quedó con su propietario en el Port de Sagunt. Luego, le dijo que quería probarla y, con esa excusa, le dio un empujón y se dio rápidamente a la fuga; una acción que al final acabará pasándole factura después de que la Policía Local de Sagunt lograra detenerle y recuperar el vehículo.

Los hechos se produjeron el pasado miércoles. El joven finalmente arrestado aprovechó que el dueño de la bici la había puesto en venta en una red social para quedar con él en la avenida del Mediterráneo del Port sobre las 19 horas. Se trataba de una bicicleta eléctrica de carretera de gran valor y que apenas se había depreciado, ya que había sido comprada este mismo año.

El propietario, de unos 60 años, decidió acudir a la cita con un familiar más joven y, aunque intentaron extremar las precauciones al no acabar de fiarse, el supuesto comprador terminó por empujar al más mayor y huir con ella a toda prisa.

Al dar la descripción del sospechoso y de la bici robada, tanto la policía local como nacional se pusieron en alerta. Apenas una media hora más tarde, agentes locales vieron entrando en una casa de empeños de Sagunt a un chaval que llevaba una bici gris exactamente igual a la sustraída esa misma tarde.

De inmediato pararon para identificarle y pedirle explicaciones sobre la procedencia del vehículo. Tras dar unas explicaciones poco creíbles, se comprobaron los datos de la bici y se verificó que era la robada.

Con antecedentes policiales

De hecho, al lugar acudieron los propietarios y además de identificarla, reconocieron al chico que se la había quitado.

Por ello, los agentes le detuvieron por un delito de hurto. Hasta el lugar se desplazaron también varios policías nacionales que finalmente le trasladaron a la comisaría del Port de Sagunt.

El joven arrestado, de unos 24 años, resultó tener su domicilio en la misma población y contar con antecedentes policiales, según ha podido saber Levante-EMV.