El Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) que el Ayuntamiento de Sagunt valora municipalizar tendrá un coste este año de casi medio millón de euros. Así se desprende de la reciente adjudicación a la empresa Novaedat Benestar S.L.U
Se trata de una firma diferente a la que prestaba el servicio hasta ahora y que, a finales de 2019, vivió varias protestas de las trabajadoras, que demandaban la municipalización y censuraban el impago de algunos atrasos.
Aún con esta adjudicación, el gobierno local mantiene su compromiso de valorar si opta por prestarlo de forma directa. «En cuanto esté aprobado oficialmente el presupuesto del ayuntamiento para 2020, empezaremos a valorarlo con idea de tener ya clara la decisión de cara al año que viene», explicaba a Levante-EMV el concejal de Servicios Sociales, Alejandro Sotoca.
Esta apuesta por la municipalización quedó clara el pasado mes de julio, cuando el pleno aprobó una moción en esta línea presentada por EU y respaldada por el resto de grupos que vconforman el gobierno local, PSOE y Compromís. Entonces, ya se defendió la medida « por razones de interés social» y porque la gestión directa supone el ahorro ya inicial del IVA y el beneficio empresarial que se abona a la empresa gestora.
En ese momento, el SAD contaba con una plantilla de 26 profesionales, algunas de las cuales llevaban 15 y 20 años prestando el servicio. Se trata de personal externo a la administración municipal, por ello, debe contratarlo.
En concreto, este servicio se encarga de prevenir y atender situaciones de crisis personal y/o familiar realizando, entre otros, servicios como la limpieza y aseo del hogar; apoyo personal elaborando comidas o realizando la compra; actividades de carácter educativo que potencian el aprendizaje de pautas; la integración social, y la atención a las personas en situación de Dependencia reconocida.
263 atendidos en 2018
En 2018, el SAD atendió a 263 personas durante un total de 28.039 horas en las que se les proporcionó todo tipo de apoyo: Domésticos, psicológico, de rehabilitación, de atención personal, carácter social y educativo.
El departamento municipal de Servicios Sociales impulsó en los años 80 del pasado siglo la creación de una cooperativa de mujeres para prestar este servicio con el objetivo de garantizar la calidad del servicio a través de la formación de las trabajadoras y favorecer la inclusión en el mercado laboral de personas con dificultades de acceso al mismo. Aunque con el paso del tiempo, alió fuerzas con otra, cuando las grandes empresas constructoras empezaron a ver el negocio que había en el sector, acabaron haciéndose fuertes en él. Como aseguran desde el consistorio, actualmente, y a través del departamento municipal de Promoción Económica, se ofrecen cursos sobre atención doméstica para poder cerrar el círculo con personas formadas y del municipio.
