Las asociaciones integradas en FAMPA-Valencia y la federación de asociaciones de vecinos de Sagunt realizaron ayer una hoguera reivindicativa en el solar donde está prevista la construcción del IES número 5 del Port de Sagunt, donde reclamaron una educación pública, inclusiva, participativa y de calidad.

En concreto leyeron este manifiesto:

Las asociaciones integradas en la agrupación comarcal de FAMPA-VALENCIA en el Camp de Morvedre y en la Federación Vecinal Saguntina consideramos que la Educación es un elemento crucial para lograr el desarrollo integral de las personas y su inclusión en la sociedad, pero la Educación también es vital para garantizar el progreso de la sociedad y su adaptación a los cambios.

Entendemos que la Escuela Pública ha de ser el eje vertebrador de la enseñanza por ser la única que garantiza la igualdad de oportunidades y, en este sentido, reclamamos que se siga invirtiendo en Educación Pública para recuperar lo perdido por los recortes de etapas anteriores y para alcanzar un mayor desarrollo de la Escuela Pública.

La Enseñanza Pública ha de ser el referente. Por eso, cuando hay suficientes plazas, en lugar de eliminar unidades en la Educación Pública, lo justo es retirar los conciertos con las entidades privadas. Todos los centros sostenidos total o parcialmente con fondos públicos deben garantizar una distribución equitativa del alumnado con NEE y compensatoria -incluidos los concertados-, lo que no sucede hoy en día. Así mismo, solicitamos que se reduzcan las ratios de alumnado por aula para favorecer la calidad educativa y que se siga avanzando y consolidando la educación pública desde los 0 años. Instamos a la administración a revisar los criterios de admisión del alumnado para garantizar que se admita automáticamente en el mismo centro a los hermanos y a las hermanas que lo soliciten, sin que todo ello suponga una ampliación de la ratio de los grupos.

Actualmente, la ratio de alumnado en las aulas de la Educación Secundaria Obligatoria están al límite en nuestra población, valga de ejemplo el caso del IES Eduardo Merello que tiene algunos grupos con más de 30 estudiantes por aula. El próximo curso 2020/2021 accederán a la ESO las personas nacidas en 2008 para las que hubo que habilitar en su día unidades extraordinarias. Generar espacio para ese alumnado afectará durante varios años a los diferentes Institutos y a toda la Educación Secundaria, al Bachillerato y a la Formación Profesional. Pese a que esta situación es conocida desde hace 11 años, llegan tarde las inversiones prometidas. Por ello instamos a la Administración a que nos informe de cómo se va afrontar esta situación a corto y medio plazo y a agilizar el plan EDIFICANT, que además del IES nº5 contempla otras inversiones necesarias en las infraestructuras educativas de la comarca.

La Formación Profesional es una excelente opción para acceder al mercado laboral y para mantener el empleo, pero también para garantizar la competitividad de las empresas. Por ello destacamos nuevamente la necesidad del refuerzo de la Educación Pública mediante la concreción en nuestra comarca de un Centro Integrado Público de Formación Profesional con sede compartida entre los IES Eduardo Merello y Jorge Juan, logrando así una excelente oferta formativa. En línea con lo anterior, el IES Eduardo Merello precisa de una importante rehabilitación que, entre otras cuestiones, conlleva la retirada del fibrocemento presente desde 1964 y que, como indicó el Director Territorial, no se ha realizado porque primero debe definirse el Centro Integrado Público de FP.

La Educación Pública no puede ser ajena a los problemas de la sociedad.

Solicitamos que el alumnado de la ESO también tenga acceso a las ayudas de comedor y la gratuidad del transporte colectivo para todo el alumnado de educación obligatoria. Esta medida, además de ser acorde al propósito de la gratuidad de la educación pública, también ayudará a luchar contra el cambio climático y a mejorar la calidad del aire.

Otras medidas que ayudarán al fomento de una movilidad sostenible son el desarrollo de programas de sensibilización, la ampliación de infraestructuras que la favorezcan, como la instalación de aparcabicicletas, tanto en el interior como en el exterior de los centros para permitir el estacionamiento momentáneo a quienes acompañen a sus hijas e hijos. Es preciso ampliar la dotación de equipos psicopedagógicos, de profesionales (PT, Educadoras/es€) y recursos que permitan realmente la implementación de la nueva normativa de inclusión. Solicitamos que se siga avanzando en la rápida sustitución de los y las diferentes profesionales, como docentes, educadoras/es, conserjes...

Queremos una Educación Pública que atienda a la diversidad del alumnado y sea sensible a las diferencias en los procesos madurativos, inclusive en lo relativo al control de esfínteres en los niños de infantil, de modo que se cuente con recursos suficientes para que sean atendidos en el centro durante el horario lectivo, sin que haya que llamar a los familiares. Consideramos necesario contar con profesionales de la salud y con desfibriladores en los centros escolares.

Queremos una educación Inclusiva que garantice la igualdad de oportunidades y atienda a las diferencias económicas, de género, culturales o derivadas de cualquier otra condición personal o social. Recoge en su preámbulo la LOMCE, suponemos que a modo de broma, que «Una democracia cada vez más compleja y participativa demanda ciudadanos crecientemente responsables y formales», pues bien, esta misma ley ha dejado sin capacidad de decisión a las familias, al profesorado y al alumnado en los Consejos Escolares. Propone la LOMCE un modelo educativo en el cual la ciudadanía no tiene derecho a voto. Por todo lo anterior solicitamos que se derogue la LOMCE a la mayor brevedad en favor de una nueva ley educativa realmente democrática, participativa, inclusiva y de calidad que tenga al alumnado como centro, proporcione herramientas para transformar el mundo y potencie a la Escuela Pública.