El reguero de medidas contra la expansión del coronavirus no cesa. El último en adoptar decisiones drásticas ha sido el Ayuntamiento de Gilet, que en respuesta a la detección de, al menos, una infección, ha dedicido adelantarse a la suspensión de las clases, que entrará en vigor a partir de mañana viernes.

Así lo ha confirmado el alcalde, Salva Costa, quien señala que "como medida preventiva contra el COVID-19, no habrá actividad en el Minicole, el colegio rural agrupado Baronia Baixa ni el instituto La Baronía Sant Antoni Abad".

Además, el consistorio también ha prohibido el acceso a los parques públicos, que "quedan precintados", según apunta el socialista.

"Rogamos seguir en todo momento las indicaciones de las autoridades, extremar todas las precauciones, tomar todas las medidas higiénicas y sanitarias y minimizar nuestra vida social para combatir la propagación del virus. También recomendamos evitar las reuniones y encuentros con más gente a cualquier lugar o comercio. Con prevención, ayuda y comprensión acabaremos pronto con el COVID-19 y con esta situación", ha concluido Costa.