Un grupo de jóvenes se saltó durante la noche de ayer el confinamiento en Albalat del Tarongers. Una cuadrilla de amigos se reunía en plena calle, pese a la orden de permanecer en casa. Los vecinos avisaron a la autoridad municipal, que se vio obligada a realizar un bando con el que seexigió que volvieran a sus domicilios y que cumplieran con las medidas decretadas en el estado de alarma.

En el bando también se les avisaba de que su comportamiento iba a ser puesto de conocimiento de la Guardia Civil y la Policía Local, como así se hizo. Minutos después del mensaje, se personaba en Albalat una patrulla de la Guardia Civil, aunque ya no pudo dar con los jóvenes.

La alcaldesa, Maite Pérez, lamentaba lo ocurrido y aprovechaba Levante-EMV para solicitar a todos los vecinos que se queden en casa, al tiempo que avisaba de las posibles sanciones que acarrea el saltarse la orden del Gobierno.

Por su parte, el Ayuntamiento de Gilet también se ha visto obligado esta mañana a realizar un bando ante la concentración de vecinos en el consultorio médico. Han sido los mismos facultativos los que han solicitado la medida al verse desbordados por casos de escasa relevancia desde el punto de vista médico.

El alcalde, Salva Costa así lo ha hecho, ha emitido el bando recordando a los residentes que sólo deben acudir al médico en caso de urgencia, ya que tienen un servicio telefónico para consultas.