En tiempos de no bajar la guardia ante el coronavirus, la Leishmaniasis en humanos es una enfermedad a la que también se mira de frente en la Vall de Segó, una zona de El Camp de Morvedre donde el año pasado se registraron varios casos y donde se tiene claro que la prevención ante ella también es una herramienta fundamental.
La Leishmaniasis es una infección muy conocida porque afecta a los perros, pero también se da en las personas pues se transmite simplemente por la picadura de un mosquito infectado. Aunque se puede tratar y curar, también es posible esquivarla siguiendo algunos consejos. Por ello, bajo la directriz de educar, concienciar y prevenir, el Ayuntamiento de Faura en colaboración con el centro de salud incluso organizó un acto para tratar la cuestión poco antes del estado de alarma.
«La Leishmaniasis puede llegar a ser una enfermedad grave, de ahí que impulsemos esta campaña de concienciación. Se trata de educar a la ciudadanía, mostrar los posibles síntomas y ante todo impulsar el desarrollo de medidas de prevención», apuntaba Gonzalo Palomar, el médico de familia y Jefe de Zona a nivel sanitario.
El parásito que genera esta enfermedad encuentra en los perros su principal reservorio. Por esto, los médicos de Les Valls ponen el acento en la necesidad de cuidar al máximo la higiene y la salud de las mascotas con el fin de evitar la posibilidad de transmisión.
«Esta enfermedad se transmite por vectores, es decir, el parásito se transmite mediante la picadura de un mosquito que ha picado al perro infectado y posteriormente al humano de forma que transmite la enfermedad. Es un caso de salud pública, una zoonosis», apuntaba Susana Lluesma, médica de atención primaria y microbióloga.
Incidencia en Les Valls
España y muy especialmente la cuenca mediterránea, es un área endémica para la enfermedad y la zona de les Valls y Almenara han constatado últimamente cierto número de casos, según han ratificado desde la Conselleria de Sanitat a Levante-EMV aunque sin detallar las cifras concretas debido que por ahora todos los esfuerzos se centran en la Covid-19.
«No es que hayamos detectado aquí un brote, pero queremos concienciar a los vecinos de la importancia de prevenir y acudir al centro de salud en caso de tener algún tipo de sintomatología», apunta el responsable médico Gonzalo Palomar.
La enfermedad, como explicaba este sanitario, presenta habitualmente en los humanos dos tipos de manifestaciones clínicas: una cutánea, que se reconoce por lesiones en la piel, y otra visceral. Esta última provoca fiebres prolongadas, cansancio y pérdida de peso, lo que la hace «bastante compleja en el diagnóstico», admitía el médico.
Por esto último, cuanto más se conozcan sus síntomas, más fácil puede ser reconocerla e iniciar el tratamiento adecuado.
Anualmente se detectan en el mundo un millón de casos nuevos de esta enfermedad y son 50.000 las personas que mueren, especialmente en países poco desarrollados.
