La avería en el emisario submarino de Canet d' En Berenguer que originó en enero el temporal 'Gloria' y del que informó en exclusiva Levante-EMV entró ayer en la arena política, si bien la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR) y los ayuntamientos de Canet y Sagunt se apresuraron enseguida a dejar claro que esa rotura «no ha afectado ni afectará a esa playa o a las colindantes», ni «supondrá un problema para los bañistas».
Un comunicado del portavoz de Ciudadanos en Sagunt, Salvador Montesinos, fue el que desencadenó la polémica, al criticar la inacción ante este problema y llegar a decir algo que luego la EPSAR y los dos consistorios negaron: «Se está poniendo en riesgo la salud de la ciudadanía y perjudicando al medio ambiente sin que las autoridades competentes hagan nada por remediarlo».
Desde la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR), a preguntas de este diario, de inmediato descartaron cualquier vertido irregular o dañino para las personas o el medioambiente. De entrada, dejaron claro que el agua vertida por el emisario siempre se depura previamente y, además, desde que se detectó la rotura en Canet, se está clorando también para mayor seguridad, tal y como hacen siempre en estos casos.
Como ya adelantó este diario, la Entidad de Saneamiento impulsó hace semanas la reparación del tramo roto mediante una intervención de emergencia. Estas obras esperan iniciarse en breve si bien desde la EPSAR descartaban que estos trabajos vayan a suponer algún problema para los usuarios de la playa pues su idea es desviar temporalmente los vertidos por otra zona.
Junto a ello, aseguraban que se trata de obras que Costas exige hacer cuanto antes y de ahí que se vayan a acometer en verano con un periodo de ejecución de 66 días.
Aunque desde Ciudadanos denunció en un principio que esos vertidos eran de aguas fecales y luego matizó que eran «residuales», sus críticas levantaron ampollas en los gobiernos locales de Canet d' En Berenguer y Sagunt, al coincidir en que había creado «una alarma innecesaria e irreal».
El alcalde de Canet, Pere Antoni, fue claro. «El agua de nuestra playa está cristalina. Eso lo puede ver cualquier que se acerque allí», decía visiblemente enojado al creer que las declaraciones de Cs «están dañando la imagen de Canet con un arsenal de mentiras».
El edil de Aguas de Sagunt y teniente de alcalde de la playa de Almardà, que linda al norte con Canet, también quiso mandar un mensaje de tranquilidad al tiempo en que reprochaba la «irresponsabilidad» del portavoz de Cs. «Siempre se están vertiendo aguas limpias, depuradas y cloradas. No hay ningún peligro. Es lamentable que el señor Montesinos, sin informarse bien, lance esas noticias infundadas pero que pueden dañar al turismo sin base alguna», dice.
