Un acuerdo de última hora que hoy debe ser ratificado por la asamblea de trabajadores ha permitido dar una salida pactada al conflicto en la planta de Pilkington en Sagunt. Después de que la dirección planteara el despido de 82 trabajadores primero y 56 después, el comité de empresa anunció ayer que, «tras varias horas de reunión, el acto de mediación en el Tribunal de Arbitraje Laboral finalizó con la firma de un preacuerdo que establece un plan de viabilidad alternativo, en el que se evitan los despidos anunciados por la empresa».
Estas fuentes no han querido precisar los detalles del acuerdo hasta que hoy se presenten a los trabajadores, aunque sí adelantan que la solución pasa por la aprobación de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que se aplicará «durante un tiempo prolongado». La primera medida tras alcanzar este consenso ha sido desconvocar los paros de una hora que los sindicatos habían programado para hoy, mañana y el viernes.
Cabe recordar que, como consecuencia de la ralentización de la actividad como efecto de la crisis sanitaria, la dirección de Pilkington en Sagunt planteó prescindir de casi una cuarta parte de la plantilla que componen 400 trabajadores, además de aplicar rebajas salariales de más del 20 %. La empresa llegó incluso a señalar al comité de empresa que la realización de los paros «incrementarían la probabilidad de un cierre completo» de la planta de Sagunt.
Después de muchas reuniones y de voces que alertaban de la estrategia de Pilkington de abaratar los costes de un hipotético cese total de su actividad en el manipulado y transformación de vidrio plano, el comité de empresa ha logrado que la dirección aparque los despidos y falta saber las concesiones que ha tenido que hacer en otras áreas.
Este preacuerdo supone un alivio para la situación de incertidumbre que vive la industria en Sagunt y particularmente el sector vinculado al automóvil. De hecho y según alertan desde UGT, empresas como Tumesa, Galmed, Gonvarri o ArcelorMittal se encuentran en dificultades de distinto tipo, pero todas vinculadas con los efectos paliativos del descenso en la actividad que ha supuesto la crisis sanitaria.
