El PP de Sagunt no se ha mordido la lengua, después de que el gobierno municipal presumiera esta semana de cumplir la Ley de Morosidad con el plazo medio de pago a sus proveedores.

Según el portavoz popular, Sergio Muniesa, el informe del tesorero sobre esta cuestión refleja que «no solo tienen pendientes de abonar 2,4 millones del último trimestre en facturas que ya han sobrepasado el límite legal de 30 días , sino que, a esta cantidad, hay que sumarle otros 1,1 millones que a principios de julio llevaban registradas más de tres meses y no se han tramitado. Eso son casi 3,5 millones de liquidez que se resta al entramado empresarial de la ciudad».

El exalcalde añade que «mientras el tripartito intenta sacar pecho al afirmar que después de año y medio ha conseguido reducir el plazo medio de pago a sus proveedores, la realidad es que hoy hay varios millones en facturas pendientes que han sobrepasado el plazo legal establecido. Ese es el verdadero reto -señala Muniesa- que deberían fijarse, el pagar en tiempo y forma para dar liquidez a las empresas y a las personas que trabajan en ellas».

Los populares ya denunciaron hace unas semanas que la «incompetencia» del gobierno municipal «había hecho que la SAG dejara de pagar a sus proveedores en un momento tan complicado como el actual, y todo porque llevaban cinco meses sin cobrar del ayuntamiento. Ahora, nuevamente el tripartito que preside el socialista Darío Moreno ahoga a los autónomos y las pequeñas empresas».

Anuncios frente a los problemas

A estos colectivos «no se les resuelven los problemas con anuncios, mientras tienen pendiente el pago de facturas por servicios realizados para el ayuntamiento», señala el portavoz popular, quien añade que «si de verdad en estos meses de pandemia se han fijado como objetivo ayudar a los ciudadanos y agilizar los pagos, que den también solución al Consell Local Agrari, que no ha pagado ni una factura durante el último trimestre y que ha elevado a más de 100 días el plazo medio de pago o que liquiden los casi 2,4 millones que debe el ayuntamiento en facturas pertenecientes al periodo entre abril y junio y que se encuentran fuera de plazo».

Muniesa lamenta que el problema tiene su origen en la «mala gestión», ya que la liquidez de las arcas municipales no está puesta en cuestión.