El Ayuntamiento de Gilet ha adjudicado esta semana a la empresa Opsa la reforma del campo de fútbol de la Maladitja por un importe cercano a los 385.000 euros. Esta actuación, que se espera que esté lista en poco más de dos meses, se centra en la instalación de césped artificial, aunque también contempla la renovación del alumbrado, la ampliación de la parcela, el montaje de las infraestructuras necesarias en la zona del bar y los aseos, la sustitución del vallado perimetral y la colocación de redes protectoras.
Pese a que esta obra llega después de años de reclamaciones, el acuerdo plenario para su ejecución no fue unánime, después de que un grupo de la oposición votara en contra por una presunta vinculación de la adjudicataria con el expresidente de la Diputación de València, Alfonso Rus. El resto de ediles votó a favor por ser la oferta de Opsa la mejor y, posteriormente, el gobierno local confirmó que esa relación no existe, más allá de que un miembro de su consejo comparte nombre y primer apellido.
