El Dragón de la Calderona, la impresionante casa-escultura de Gilet, sufrió este miércoles un intento robo a plena luz del día que provocó diversos destrozos e hizo activar la alarma de este lugar de propiedad privada que el ayuntamiento quiere convertir en un centro de interpretación y punto de información turística.

Esto obligó ayer a reforzar la seguridad de un espacio que ya sufrió un intento de robo hace aproximadamente hace un año y medio; una acción que también provocó desperfectos, como reconocía ayer a Levante-EMV uno de los propietarios del lugar, el saxofonista Perico Sambeat. «No entiendo por qué hacen esto. Aquí no hay nada de valor», decía.

Pero los daños ocasionados al forzar una puerta no son los únicos que ennumeraba ayer con decepción Sambeat. A ellos se les suman otros que apuntan al vandalismo e incluso a una escasa sensibilidad y cuidado al visitar el lugar, pues abundan las decoraciones de cerámica rotas que en su día daban forma a ese espectacular dragón.

Esas ausencias se notan en distintas zonas de la construcción, desde la puerta de entrada, a puntos de iluminación o en la misma decoración del tejado de la Casa-Dragón; un último lugar donde también se ha podido ver a visitantes ávidos de fotos impactantes, aunque ahora queda la duda de si todos ellos han sido tan cuidadosos como se requiere en un espacio así.

Por ello, Perico Sambeat aprovechaba para hacer «un llamamiento al civismo, al respeto y la sensibilidad» de quienes se acerquen al lugar e instaba a cuidarlo al máximo «como creación artística que es». Según apuntaba: «Ves estas cerámicas arrancadas o rotas es de un vandalismo bárbaro incomprensible, al menos para mí. Hay destrozos, se llevan piedras... es una pena».

El músico recordaba además la intención del ayuntamiento de llegar a un acuerdo de gestión con los propietarios que permita convertirlo en un centro público.

El portavoz comarcal de Compromís, Emili Clemente, no dudó en acudir ayer al Dragón en cuanto conoció lo sucedido «para respaldar a los propietarios» y demandó luego «la máxima colaboración vecinal para que el lugar pueda preservarse lo mejor posible».

Clemente también resaltó la intención municipal de convertir el Dragón en un espacio que podrán disfrutar los ciudadanos. «Estamos hablando de un sitio muy especial lleno de arte que hay que cuidar», dijo además de lamentar tanto los daños ocasionados por los ladrones como por quienes han roto todo tipo de cerámicas.

Como avanzó este diario, el Ayuntamiento de Gilet prevé firmar un convenio de colaboración con los propietarios de este complejo ubicado en pleno monte que impulsaron hace años la escultora Rhea Marmentini, el reconocido saxofonista Perico Sambeat, así como la pintora y antropóloga Judit Nador. La intención es que el proceso de recuperación sea supervisado por Rhea Marmentini y que ésta mantenga allí una sala de exposiciones.