Sagunt quiere retomar las visitas al Horno Alto en noviembre. Así lo ha avanzado el vicepresidente de la Fundación de Patrimonio industrial, Roberto Rovira, quien afirma que la petición ya se realizó en el último patronato celebrado. Ahora se está a la espera del pronunciamiento del servicio de prevención de la Fundación, que determinará si son posibles o no estas visitas y en qué condiciones se realizan dadas las limitaciones de aforos establecidas por Sanidad a causa de la pandemia y el poco espacio del bien patrimonial para garantizar las distancias de seguridad, comentaba el edil.
Cabe recordar que las visitas se suspendieron el pasado mes de marzo con el estado de alarma y tras el ERTE de una de las trabajadoras, que es la encargada de las mismas. «No se podían retomar hasta que no se reincorporaran los trabajadores», entre otras cosas, explicaba Rovira.
Por otro lado, la fundación también está a la espera de un informe del departamento de Actividades del Ayuntamiento de Sagunt que dé luz verde al uso del elevador con todas las medidas de seguridad para sus usuarios. «Todo lo que ase de la planta baja no es visitable en estos momentos porque no cuenta con las medidas de seguridad exigidas. Habrá que esperar al informe municipal para saber qué medidas hemos de adoptar para poder usarlo», terminaba.
Las aportaciones anuales que debe realizar el Ayuntamiento de Sagunt a la Fundación de la Comunitat Valenciana para el Patrimonio Industrial y Memoria Obrera del Puerto de Sagunto. como principal patrono, se encuentran bloqueadas desde hace dos años.
Las deudas que arrastra la entidad llevaron a la administración local a encargar este verano un auditoría en la que se han detectado importantes «defectos contables» que deben subsanarse para poder reactivar la inyección de liquidez y reflotar si es posible la situación económica por la que atraviesa la entidad.
Según fuentes municipales cercanas a la fundación «estos desajustes» detectados «han de resolverse cuanto antes para que desde Intervención no se pongan reparos a las obligaciones económicas que el ayuntamiento mantiene con la fundación», adelantaba a Levante-EMV, obligaciones que ascienden en 2020 a 90.000 euros, después del incremento que esta partida ha experimentado en los presupuestos de este año. Con anterioridad (2018-2019), la subvención del ayuntamiento era de 60.000 euros, cantidad que viene sin abonarse desde 2018 aunque en ese mismo año y después de que Sagunt se convirtiera en el principal patrono de la entidad, el consistorio realizó una aportación de 380.000 euros, para hacer frente a las deudas que se arrastraban de años anteriores.
Según la misma fuente, el objetivo ahora tras la auditoría es «reformular las cuenta de 2018 y 2019» para poder continuar con las aportaciones anuales a la fundación, «cometido en el que ya se viene trabajando desde el ayuntamiento» , añadía, y que esperan poder resolver «en breve».
Al bloqueo de la aportación municipal se suma el retraso de los pagos de la Generalitat, otro de sus patronos, una obligación que asciende a 60.000 euros anuales y que se ejecuta a año vencido e incluso a 18 meses. En agosto de 2020 se saldó la aportación de 2019.
Los problemas de tesorería que arrastra esta fundación han abocado a esta al endeudamiento que se calcula en la actualidad en 170.000 euros, dentro de los que se encuentran los 31.0000 que se deben a proveedores y 20.000 a SEPIDES.
Los problemas económicos que arrastra la fundación , la salida del gerente y los ERTES de sus dos trabajadores desde marzo afectan a su gestión y a la puesta en marcha de proyectos que llevan sin finalizarse desde hace años como es el caso del museo industrial, por lo que IP pedirá el traspaso a la diputación d e la gestión d e la fundación.
Pese al reciente anuncio del comienzo de las obras de mejora del entorno del museo industrial, lo cierto es que la zona está ausente de movimiento de operarios. Ni tan siquiera se han retirado los contenedores de mercancía que se contemplaban en la actuación. Sin embargo, desde la ayuntamiento se explica que el lunes se firmó el acta de replanteo aunque la empresa tiene unos días para comenzar la intervención.
170 firmas en un día en defensa del patrimonio del Port
Alrededor de 170 personas habían respaldado ayer, al cierre de esta edición, el manifiesto en defensa del patrimonio del Port de Sagunt que han impulsado las asociaciones AMIMO, APIPS y APIVA junto al investigador Buenaventura Navarro. En poco más de 24 horas, la iniciativa impulsada en la plataforma digital «change.org» había recabado el respaldo de muchos ciudadanos anónimos y estudiosos que incidían en aspectos como la necesidad de un lugar para consultar el archivo.
Sagunt quiere retomar las visitas al Horno Alto en noviembre
Sagunt quiere retomar las visitas al Horno Alto en noviembre. Así lo ha avanzado el vicepresidente de la Fundación de Patrimonio industrial, Roberto Rovira, quien afirma que la petición ya se realizó en el último patronato celebrado. Ahora se está a la espera del pronunciamiento del servicio de prevención de la Fundación, que determinará si son posibles o no estas visitas y en qué condiciones se realizan dadas las limitaciones de aforos establecidas por Sanidad a causa de la pandemia y el poco espacio del bien patrimonial para garantizar las distancias de seguridad, comentaba el edil.
Cabe recordar que las visitas se suspendieron el pasado mes de marzo con el estado de alarma y tras el ERTE de una de las trabajadoras, que es la encargada de las mismas. «No se podían retomar hasta que no se reincorporaran los trabajadores», entre otras cosas, explicaba Rovira.
Por otro lado, la fundación también está a la espera de un informe del departamento de Actividades del Ayuntamiento de Sagunt que dé luz verde al uso del elevador con todas las medidas de seguridad para sus usuarios. «Todo lo que ase de la planta baja no es visitable en estos momentos porque no cuenta con las medidas de seguridad exigidas. Habrá que esperar al informe municipal para saber qué medidas hemos de adoptar para poder usarlo», terminaba.