La entrada este al casco urbano de Sagunt junto al cauce del río Palància se ha reabierto al fin al tráfico tras poco más de dos meses de obras; unos trabajos impulsados por la empresa pública Aigües de Sagunt con los que se espera solucionar un viejo problema ya habitual en los días de lluvias fuertes, cuando el colector existente se colapsaba y ello provocaba fugas de agua residuales en el propio vial, roturas en el pavimento y problemas de evacuación de fecales de los edificios que conectaban a ese colector.

Así lo explicba a Levante-EMV el edil responsable de Aigües de Sagunt, Pepe Gil. «Se ha instalado un nuevo colector de aguas residuales de 155 metros de longitud y diámetro 500 mm. Además, se ha rehabilitado otro tramo existente y se han renovado las acometidas domiciliarias de todas las edificaciones existentes en el tramo del nuevo colector canalizado».

El edil admitió que las obras han superado en unos días el plazo establecido «por varios imprevistos», desde una fuga detectada y reparada en la tubería que suministra agua potable al Port de Sagunt, a unos trabajos arqueológicos o fuertes lluvias. No obstante destacaba que al fin se ha solucionado otro «punto negro» en caso de fuertes lluvias.