El concejal de Contratación de Sagunt, que también lo era de Deportes hasta hace unos días, Javier Raro, se ha mostrado «satisfecho» con el reinicio de la construcción del pabellón del Port, que supone «un paso más en el objetivo de acabar unas obras que acumulan demasiados atrasos». Además, ha admitido que el proyecto ha resultado «muy complejo», tras encontrárselo a su llegada en pleno procedimiento que quedó desierto. A partir de ahí, según el socialista, «en tiempo récord, realizamos esta nueva licitación que ha llevado al inicio de las obras», aunque sabe que «la faena no queda aquí. Haremos un seguimiento exhaustivo para que en aproximadamente 18 meses el pabellón esté en uso».
Además de la necesidad que tiene el deporte de Sagunt de contar con esta infraestructura, otra de las prisas por su finalización se justifica por los plazos dados por la Generalitat para acabar los proyectos vinculados al Plan Especial de Apoyo a la Inversión Productiva en Municipios de la Comunitat Valenciana. Según explica Raro sobre una situación que también afecta al Museo Industrial y que en el pabellón afecta a casi 2 millones de euros, «el plazo de finales de 2021 no se ha modificado, pero nos han trasladado la posibilidad de agotar la financiación de la Generalitat en las certificaciones de obra de este año y que posteriormente se ejecuten a través de los fondos municipales. Por ahora -según precisa el edil -, esa es nuestra intención».
