25 adolescentes de entre 14 y 30 años forman la generación de nuevas voces de Sagunt, que no solo pide soluciones a los problemas, sino que las propone desde una perspectiva joven que se plasma en el Plan Integral de Juventud 2021-2025. Por el momento y tras el último encuentro del Fórum Jove, sobre la mesa ya hay 49 remedios a las carencias de la ciudad, un documento que sigue abierto a aportaciones.
Áreas como el ocio, la convivencia, el medio ambiente, la movilidad, la emancipación, los deportes, la salud o los equipamientos son los principales intereses de estos jóvenes, que primero hicieron una reflexión individual y posteriormente trabajaron en pequeños grupos por áreas, en los que el debate y la creatividad dieron como resultado una batería de propuestas.
Por cantidad, las relacionadas con el transporte fueron las primeras con 13. Tener en cuenta la opinión de los usuarios del carril bici durante la planificaciones de esto viales; contemplar su uso por patinetes; mejorar su visibilidad con espejos; conectarlos para crear una red sin vías muertas; mejorar la red de transporte público entre los municipios de la comarca; aplicar descuentos a familias numerosas; ampliar el plazo de validez del bono bus; visibilizar y actualizar la información de las paradas; evitar situaciones de peligro en los pasos de cebra; peatonalizar zonas; permitir la circulación en bicicleta por el paseo marítimo del Port o ampliar el recorrido del autobús para que llegue hasta el campus de Burjasot son algunas de estas reclamaciones.
El ámbito de la salud otro de los que recibe más propuestas, como la existencia de acceso público a especialistas como el psicólogo; la formación en inteligencia emocional; la ampliación de la educación social en los colegios; la programación dinámica y creativa de concienciación sobre el uso de sustancias adictivas; la formación en nutrición; así como la organización de talleres de lenguaje de signos para hacer hincapié en la diversidad y la inclusión.
Respecto al ocio, los jóvenes piden más espacios cerrados, tanto céntricos como al otro lado del río, y gratuitos donde reunirse; habilitar rincones municipales abandonados para su uso público y cultural; crear un puesto de trabajo para difundir toda la información relacionada con el ocio o hacer una feria en la que se oferten deportes y extraescolares.
En cuanto a la convivencia, este grupo de jóvenes demanda la colaboración con entidades del tercer sector que luchan por la igualdad; el impulso de campañas de sensibilización en colegios e institutos en contra de los discursos de odio hacia ciertos colectivo y promover charlas de concienciación sobre desigualdades sociales. En el área de medioambiente, el énfasis se pone en la sensibilización, concienciación y acercamiento a los espacios naturales locales; el cuidado y ampliación de las zonas verdes o la reducción de la iluminación en zonas poco transitadas.
Otro tema de debate fue la emancipación, en el que se reclaman bolsas de empleo público para menores de 30 años; planes de contratación con el sector privado para los estudiantes; talleres de preparación a la vida independiente y ayudas económicas para el alquiler de primeras viviendas. Sobre el deporte, los jóvenes exigen el cumplimiento de una vieja reivindicación como la apertura de los patos de los colegios, además de ampliar la seguridad en las pocas zonas para la práctica del deporte no federado; la creación de espacios para la práctica libre del deporte; la ampliación de los horarios de las clases de educación física o abrir la oferta de actividades deportivas del ayuntamiento, sin tener que pertenecer a un club ni competir.
Por último, también muestran su preocupación por los equipamientos, que piden mejorar con más bancos en los parques, mesas de picnic, una piscina de verano en el Port o la ampliación de las bibliotecas.
