La población de Sagunt y Canet d'en Berenguer, así como sus veraneantes, dieron ayer otra muestra de civismo, al apenas provocar incidentes durante la segunda Nit de Sant Joan consecutiva sin playa.
En el caso de la capital comarcal, los principales contratiempos se debieron a las ruidos en Malvasur, mientras que en el Port se registraron dos intoxicaciones etílicas, con el foco en el aparcamiento que se encuentra detrás de la antigua Cruz Roja en la avenida Mediterráneo. Esta vía se cerró al tráfico, al igual que el Pantalán, para evitar los botellones. El resultado de la vigilancia policial en esta zona se saldó con varias altavoces requisidos, según informan desde el dispositivo.
Por lo que respecta a Canet, la Nit de Sant Joan se cerró sin incidentes. La Policía Local realizó controles aleatorios, pero no puso multas, y vigiló sin sobresaltos tanto el espectáculo de danza como el disparo del castillo de fuegos artificiales. El concejal, Eduardo Almor, ha querido agradecer “el trabajo de los agentes y el Jefe de Policía que formaron parte del dispositivo, además de felicitar a los que nos visitaron por su buen comportamiento, civismo, y respeto con las normas sanitarias”.
