La asociación de vecinos de Almardà, Corinto y Malvarrosa estalló ayer contra lo que consideran el abandono que sufre este núcleo por parte del Ayuntamiento de Sagunt. Los vertidos desde la gola de Quartell han sido el detonante de este malestar, que ha llevado al colectivo a reclamar «soluciones urgentes sin más excusas».

Además de lamentar el «severo deterioro» de estas playas y la «amenaza» que supone la inminente construcción de espigones en Almenara, los vecinos explican sobre estos últimos vertidos que «frente a las quejas de años anteriores, en abril nos reunimos con el concejal de Playas, Roberto Rovira, para trasladarle nuestra preocupación por este tema y la necesidad de buscar soluciones. Se pactó un futuro encuentro en el Consell Agrari con los agricultores, pero la realidad es que, en pleno periodo de baño, siguen las manchas marrones y los inconvenientes, sin que tengamos noticias del alcalde, el concejal de Playas ni de nadie del ayuntamiento».

Además de preguntarse si no se hubiera llevado a cabo ya alguna actuación si este problema se presentara en la playa del Port de Sagunt, la asociación de vecinos de Almardà, Corinto y Malvarrosa ha extendido su malestar a otros «menosprecios», como la limpieza del núcleo, así que «la paciencia tiene un limite y ya no vamos a aguantar más».