buena temperatura. Los 23,6º que se llegaron a registrar ayer hicieron que la playa del Port de Sagunt se llenara de gente dispuesta a tomar el sol, a pasear e incluso a darse un baño; algo poco habitual en pleno mes de octubre. En las calles del casco antiguo también se vio turistas e incluso a un grupo de un colegio suizo, si bien comerciantes de la zona lamentaban que no hubiese habido «un mercado medieval reducido», una ausencia justificada desde el gobierno local por la covid-19.