El comité de empresa de Pilkington en Sagunt ha pedido hoy formalmente en una reunión con la dirección la retirada del expediente de regulación de empleo que contempla echar a la calle de forma "inminente" a 116 empleados al considerar que "claramente no reúne las causas objetivas, sino que responde a una decisión política por parte de la multinacional".
También han rechazado el anunciado cierre de la línea de laminado y el desvío de su producción de parabrisas a otra planta, recordando que "los modelos que producimos actualmente se han conseguido gracias a los esfuerzos realizados por la planta de Sagunt", decían en relación a los acuerdos alcanzados, como en julio de 2020, cuando aceptaron rebajas salariales. Por ello, veían un "robo" que esos encargos "vayan a ser trasladados a otra planta", según explicaban
Los responsables sindicales asistentes a la reunión han dejado claro que, antes de la reforma Laboral, un expediente como el presentado hubiera sido rechazado por la Administración.
El encuentro se ha realizado en presencia del subdirector general de Relaciones Laborales de la Dirección General de Trabajo de la Generalitat, Ximo Vañó, en las instalaciones de la firma mientras fuera numerosos trabajadores se concentraban y hacían una pitada, lo que ha llevado a la dirección a advertir que iba a prohibir que los trabadores estuvieran dentro de las instalaciones si no trabajaban y que, si valora alguna situación como negativa, trasladaría las reuniones a otro lugar.