Los vecinos del carrer la Pau de Sagunt dispondrán en unas semanas de una renovada red de agua potable y saneamiento, una infraestructura que ha causado serios contratiempos en la zona. Y es que las obras que se ejecutan desde Canalizaciones Civiles (CCSA) avanzan a buen ritmo y cumplen los dos meses de una actuación que debería estar lista en menos de cinco desde su puesta en marcha.
Buena muestra de la necesidad de esta inversión que ronda los 320.000 euros es la necesidad de que una camión cuba tuviera que acudir entre la primavera y el verano pasados cerca de 15 veces en menos de tres menos para aliviar el colector de aguas residuales. Y es que esta red presentaba problemas en su funcionamiento y en el mantenimiento de los colectores a causa de su insuficiente capacidad hidráulica, especialmente cuando se producen fuertes lluvias, y de una elevada sedimentación que provoca atascos, todo ello debido a un alto nivel de deterioro debido al paso del tiempo que impide su correcto desagüe.
La actuación de Aigües de Sagunt sirve también para sustituir la tubería de fibrocemento de la red de agua potable por otra de fundición dúctil, al tiempo que se mejorará el acabado superficial de la calzada, puesto que se ha retirado todo el adoquinado de la calle y posteriormente se asfaltará, teniendo en cuenta que, según los estudios previos a la intervención, restituir los adoquines tendría un coste mayor y, sin embargo, el acabado sería peor.
Antes del inicio de las obras, el concejal de Aguas, Pepe Gil quiso pedir disculpas a los vecinos por el retraso de esta actuación que, según sus previsiones, «en unas semanas permitirá acabar con los problemas y los malos olores».
