Maestras, profesoras, catedráticas, doctoras, en definitiva la docencia tomó la palabra en el Dia de la Dona en Quartell. El acto, impulsado por la concejalía de Igualdad de Helga Torrente, quiso poner el valor la fuerza de las mujeres en la educación.
Quartell suma más de 150 profesionales de la educación y muchos más que protagonizan en estos años su periodo preparatorio en la universidad. Tanto es así, que la celebración del 8M se convirtió en un acto de reflexión respecto del pasado, presente y futuro de la educación. «Año tras año, hemos venido reconociendo la labor de la mujer trabajadora; comenzamos con la primera concejala de la democracia; nos detuvimos al siguiente año en las mujeres que trabajan con los almacenes de naranja, asimismo reconocimos la labor de la mujer en la sanidad sin olvidar el mundo del arte, muy especialmente en su incorporación y labor en la Unión Musical de Quartell. Este año, tras la complejidad de los cursos de pandemia, considerábamos importante reconocer la inmensa labor desarrollada desde la educación», explica Torrente.
El acto contó con la presencia de hombres y mujeres de un municipio significado por su preocupación en el ámbito educativo. Quartell apostó por celebrar el Dia de la Dona en clave de futuro, puesto que «la educación es el motor de cambio, el fundamento para erradicar las desigualdades y las múltiples violencias estructurales impuestas en la sociedad».
El debate contó con profesionales de todo el espectro de la educación. Pilar Queralt y Ricardo Díaz aportaron su experiencia y perspectiva tras jubilarse como maestros; Rafael Cuenca y Marta Ferrer comentaron su visión como docentes en activo conocedores en Infantil y Primaria, así como de la gestión de centros educativos; Tere Gallent y Susana Sebastián sumaron miradas desde Secundaria, mientras Gema Pérez y Andrea Sebastián aportaron la perspectiva de quienes inician el camino de la enseñanza.
El debate constató la necesidad de impulsar un pacto por la educación y evitar el devenir injustificado de leyes a medida de cada gobierno; de erradicar la instrucción o administración de contenidos con el objeto de ofrecer instrumento al alumnado para que forje sus aprendizajes; de saber hacer desde el reconocimiento, el respeto, la empatía y de la revalorización de la cultura del esfuerzo fueron algunos de los puntos que tejieron el panorama de la educación del futuro.
El acto de reflexión del Dia de la Dona abrió el debate entre los múltiples asistentes que participaron activamente de una apuesta en la que la mujer mantiene un protagonismo indiscutible. «La educación del futuro debe atender a las necesidades individuales para forjar la cooperación entre la ciudadanía, asimismo la diversidad reclama atenciones múltiples y dedicación diversa; la apuesta por dinamizar la acción conjunta familia-escuela pasa por el reconocimiento mutuo como factores esenciales de cambio social», tal y como se dedujo del debate.
