Fiestas Patronales. Después de que la Penya El Frente Boquerón protagonizara ayer su fiesta taurina, hoy es la jornada de los taurinos del Bou de Juliol. La semana grande de Benavites está a punto de cantar su singular Pobre de mi, aunque sus vecinos han vivido con total entrega la celebración de sus primeras fiestas patronales postpandemia. La gran afluencia de personas de toda la comarca ha convertido el pequeño municipio de les Valls en foco de diversión y puerta de las celebraciones del resto de la subcomarca. La tradicional procesión del Barril en el Dia de Santa Paula, junto a las calderas, permitía a los benaviteros recuperar su celebración comunitaria. Otro de los grandes momentos fue la cabalgata de disfraces, que registraba una numerosa participación en la que destacaron vecinos creativos, familias y grupos de jóvenes dispuestos a pasarlo muy bien. Mañana la celebración del festejo de la Mare de Déu dels Àngels reúne a los festeros en las celebraciones litúrgicas entorno a la patrona del municipio. La pirotecnia Lluch y el Pobre de Mi pondrán el punto final a una semana única en la agenda de los benaviteros, que ceden el testigo al siguiente escenario de fiestas en la comarca.

Un momento de las exhibiciones taurinas de ayer. | LEVANTE-EMV