La ganadería de Gerardo Gamón ha perdido una de sus reses en los festejos taurinos de su pueblo, Albalat dels Tarongers. Los hechos ocurrían pasadas las 14 horas de este jueves, cuando una de sus vaquillas, a la que habían bautizado como «La Mogona», se golpeaba contra unos de los barrotes de la plaza enganchando su cuerno izquierdo entre ellos. Al intentar sacarlo, el animal giró sobre su mismo cuerpo, lo que le provocó una importante lesión en el cuello de la que no se ha podido recuperar.

La vaca cayó al suelo, de donde ya no pudo levantarse hasta que el ganadero la recogió con su camión y la llevó hasta el corral. Gamón recibió la ayuda de decenas de vecinos, que colaboraron en el traslado del animal hasta su vehículo, una ayuda que ha querido agradecer.

Durante el proceso, también actuó el veterinario, que según el ganadero, intentó recuperarla al mismo tiempo que le administró sedantes para que estuviera tranquila y no padeciera.

Pese a los momentos de tensión y de sufrimiento que se vivieron por el animal, el ganadero recibió una ovación por parte de los vecinos y los aficionados als bous al carrer, que levantó en pie a toda la plaza, que a modo de condolencias, despidió a la vaquilla y a su ganadero con fuertes aplausos.

Tras este emocionante momento, la alcaldesa Maite Pérez suspendió el festejo «por respeto al ganadero y a lo que acababa de suceder», pese a que todavía quedaba la exhibición de más ganado. Por la tarde, los toros continuaron con normalidad.

Pese a que la vaca salió con vida de la plaza, el ganadero, en declaraciones a Levante-EMV, ha explicado que el animal no ha podido superar la fuerte lesión. «Estoy bastante afectado, porque era una vaquilla muy buena, pero son cosas que suceden, accidentes que no podemos evitar ni prever», comentaba Gamón.

«La Mogona», como así le llamaban, era una vaca de 8 años, que solía dar muy buenos resultados en todas las plazas donde iba, «siempre pegaba en los barrotes, no paraba de correr, era muy viva», añadía Gamón, quien recordándola intentaba recuperarse de este fuerte golpe.