El Ayuntamiento de Benavites sigue trabajando por dignificar la iglesia de Benicalaf y su entorno, a pesar de llevar 6 años con una ayuda bloqueada en la Diputación de Valencia que permitiría reanudar la rehabilitación de este templo del siglo XVII desacralizado desde hace décadas y de propiedad municipal.

Además de seguir peleando por desatascar la llegada de esta subvención de 55.000 euros, el gobierno presidido por Carlos Gil (PP) ya tiene presupuestada para 2023 la adquisición de la parcela anexa, que es propiedad de la parroquia, con tal de convertir el lugar en un espacio de recreo, con mesas de picnic y otros atractivos.

"Queremos seguir recuperando este lugar", decía el alcalde, Carlos Gil, recordando que fue hace 10 años cuando el consistorio se puso en marcha con tal de que el edificio pudiera salir de su abandono. "Junto al grupo comarcal de cronistas, empezamos a trabajar por este objetivo. En sucesivas fases hemos logrado que el tejado no se derrumbase, como ha ocurrido en alquerías cercanas, pero aún estamos lejos de completar todas las obras necesarias", admitía.

Esto último queda claro al reflejarlo en cifras. "En estos años hemos invertido 152.000 euros, pero el proyecto global se presupuestó en más de 800.000 €. Y eso fue antes de que llegara la subida de todos los materiales", apuntaba.

El también diputado provincial asegura que, en estos momentos, técnicos del consistorio están en contacto con los de la diputación para intentar desbloquear los 55.000 euros de ayuda concedidos en 2016. No obstante, era pesimista respecto a poder lograr una solución antes de las próximas elecciones municipales, "dado el mucho tiempo que llevamos ya con esto".

De lograrlo, Gil tiene claro que la prioridad sería intervenir en el lateral de la iglesia que aún presenta muchas ventanas rotas "por donde entra el agua cuando llueve" en este peculiar templo situado entre naranjos, a escasa distancia de la población.

Polígono industrial

La adecuación de la parcela colindante a esta iglesia, como ha explicado el alcalde, está ligada a las obras de urbanización del polígono industrial que se esperan impulsar próximamente, después de años de espera. "Ahora tenemos un inversor, aunque estamos pendientes de trámites de la administración autonómica y de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Algunos nos dicen que esta zona podría ir a rebufo de Parc Sagunt, pero yo creo que si puede aportar cientos de puestos de trabajo, mejor que ahora que hay un abandono de campos del 40%", apuntaba.

Junto a ello, en un encuentro con los medios de comunicación junto a la edil Raquel Sanchis, ha reconocido los problemas que sufre el consistorio tras llevar ya 23 días sin secretario del ayuntamiento "porque no hay habilitados nacionales" y su ausencia impide acciones necesarias "como transferencias y otras operaciones".

Además, destacó su voluntad de seguir mejorando espacio s como el polideportivo, continuar la eliminación de barreras arquitectónicas en las calles, así como instalar placas fotovoltaicas en edificios públicos que luego puedan servir para particulares "aunque sin constituirlo de momento una comunidad energética local como la impulsada en Canet", ha precisado.

Junto a ello, ha recordado otras acciones como la constitución del Consejo de Mayores, la reactivación de la asociación de pensionistas y la que apoya la lucha contra el cáncer.

"Trabajamos para que, gobierne quien gobierne a partir de mayo, lo hecho se pueda aprovechar", decía.