Culpan al Hospital de Sagunt de la caída de un octogenario que murió días después

El Consell Jurídic Consultiu considera que fue un accidente y fija una indemnización de 10.000 euros al no probarse que fuera la causa del fallecimiento

Vistas del Hospital de Sagunt.

Vistas del Hospital de Sagunt. / Daniel Tortajada

El Consell Jurídic de Consultiu (CJC) de la Comunitat Valenciana ha instado a la Conselleria de Sanitat a indemnizar con 10.000 euros a la familia de un hombre de 86 años que falleció en una residencia de mayores unos días después de sufrir un golpe accidental en la cabeza mientras estaba ingresado en el Hospital de Sagunt. Fue concretamente durante la maniobra de traslado mediante una grúa desde el sillón a la cama, cuando el paciente se cayó y sufrió un traumatismo craneal.

Los diferentes informes médicos no pudieron precisar si esta contusión fue el "factor precipitante o necesario" de su muerte apenas 13 días más tarde y, por este motivo, la Generalitat rechazó en un primer momento cualquier indemnización. Sin embargo, el CJC dictaminó recientemente que "sí se acreditó" que el accidente "le ocasionó una hemorragia interna que deterioró su estado neurológico".

Este golpe en la cabeza, además, "obligó a retirar el tratamiento con heparina que recibía por sus patologías previas. Todo ello supuso el aumento de la comorbilidad, empeorando su estado", añade el organismo consultivo. Sin embargo, la cuantía propuesta como indemnización por los daños morales se queda lejos de los 60.000 euros que pedía la familia, que "no aportó informe pericial que avale la relación entre la caída y la posterior muerte".

La familia pedía una compensación de 60.000 euros y Sanitat rechazó en un primer momento cualquier pago

El hombre no perdió el conocimiento tras el traumatismo, sí presentó un "breve estupor post-traumático". Un TAC urgente mostró "sangrado incipiente por el trauma". Tres días después se repitió la prueba, que detectó una "importante hemorragia" y un "extenso hematoma", además de un ictus isquémico crónico. Y es que los antecedentes clínicos del octogenario también incluían "dos carcicomas, una neumonía diagnosticada dos días antes, eventos cardio-vasculares graves y riesgo cardio-vascular muy elevado".

Causa de la muerte: desconocida

La estabilidad neurológica y la buena evolución respiratoria durante los días posteriores a la caída derivaron en el alta hospitalaria, así que la causa del posterior fallecimiento se calificó por un perito independiente como "desconocida", ya que "la actuación -sanitaria- no fue conforme a los protocolos", al sufrir el paciente "un hematoma como consecuencia de un traumatismo craneoencefálico mientras era manipulado por personal sanitario". Sin embargo, "no se puede establecer una relación de causalidad entre este hecho y el fallecimiento del paciente, máxime cuando, por su patología de base, ya presentaba de por sí un altísimo riesgo de fallecimiento".

La inspección médica también investigó el suceso y, aunque señaló que "el primer ingreso fue por neumonía, proceso infeccioso que también es causa de elevada mortalidad", incidió en que "evidentemente, consideramos que la caída del paciente fue un hecho en absoluto intencionado, mas no exento de consecuencias. Y que en efecto no deberían darse, ya que nuestra asistencia debería ser óptima, es decir, con seguridad clínica". Al expediente también se añadieron las conclusiones del médico de la residencia de Sagunt en la que estaba el octogenario, sobre el que reconoció que volvió al centro "en una situación muy deteriorada con respecto a cuando salió hacia el hospital".