Una ‘muralla verde’ de 5,7 millones de euros atenuará al fin el impacto de Parc Sagunt

Algo más de 5,7 millones de euros. Ese el precio que le costará a Espais Econòmics Empresarials (EEE) las reclamadas obras de ajardinamiento y riego de los más de 3 millones de metros cuadrados de Parc Sagunt I. Además de vestir de verde una urbanización que se proyectó en 2003, se inició en 2005 y durante años solo estuvo poblada por parcelas abandonadas, este proyecto también resulta clave para proteger el Marjal dels Moros de los efectos de la creciente actividad en el polígono. 

Con este objetivo, el proyecto contempla la plantación de más de 25.000 ejemplares arbóreos y arbustivos, 460 balizas led, 89 papeleras, 39 farolas, 28 bancos de madera o 25 aparcamientos para bicicletas. Después de dar luz verde a la adjudicación de estos trabajos a la unión temporal de empresas formada por Vivers Centre Verd y Geocivil, el contrato deberá formalizarse antes del 20 de abril y en ese momento empezará a contar el plazo de 12 meses para tener lista la actuación.

La encargada de los trabajos durante un año será la unión temporal de empresas de Vivers Centre Verd-Geocivil

Durante estos casi 20 años, los cambios de planeamiento, los requerimientos de otras administraciones y organismos e incluso la aparición de restos arqueológicos fueron demorando la intervención, que incide especialmente en la mota de 3 metros de altura que separa el parque y el humedal. Además de completarla en algunos tramos, sobre esta muralla se construirá una paseo para peatones y ciclistas de más de 4,7 kilómetros de longitud y 3 metros de anchura, que se completará en ambos lados por unas franjas de 1,5 metros de amplitud para la plantación de árboles, así como la instalación de balizas de alumbrado, bancos, miradores y paneles informativos.

Después de que se elaborara el proyecto bajo la supervisión de la Generalitat y el Ayuntamiento de Sagunt, las únicas alegaciones que se presentaron durante su exposición pública fueron de Acció Ecologista Agró. El colectivo pedía que esa senda ciclopeatonal se prolongara hasta el Port de Sagunt, se le rebajaran los desniveles en algunos tramos o se corrigiera la iluminación para reducir la contaminación lumínica en el marjal.

Pantalla entre “dos mundos”

Frente a estos requerimientos, los proyectistas defendieron que los restos arqueológicos hallados condicionaban el recorrido y que su eventual alargamiento quedaba fuera del ámbito de actuación al requerir más de dos kilómetros adicionales. Agró también reclamaba ampliar la barrera verde entre Parc Sagunt y el humedal, pero desde EEE se replicó que “la mota y las plantaciones previstas son adecuadas para mantener la pantalla entre los dos mundos”. 

También sobre la iluminación se justificó la opción escogida en que sigue las recomendaciones del Instituto Astrofísico de Canarias, al situarse las balizas a 1,2 metros de altura, mientras que los desniveles previstos no superan en ningún caso el 6 %, lo que, “de acuerdo a la normativa, garantiza el uso no discriminatorio y la circulación de forma autónoma y continua de todas las personas”. 

Accesos a las parcelas para restaurantes

Otras cuestiones que aborda este proyecto son los accesos al Grau Vell, a la Alqueria de l’Advocat, al Centro de Educación Ambiental de la Comunitat Valenciana y a las parcelas reservadas para uso recreativo con la intención de ofrecer servicios de bar y restaurantes.

En el concurso para la adjudicación de este contrato, cuyo presupuesto rozaba los 6,4 millones de euros, se presentaron 10 ofertas, la gran mayoría en forma de unión temporal de empresas, entre las que encontraban Imesapi, que obtuvo la segunda puntuación más alta, Contratas Vilor y Trafisa; Obrascon Huarte Lain (OHL) o Gimecons y Ravi.

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