La Vall de Segó "protege" sus cosechas

La tradicional bendición de las aguas de la Font de Quart reunió ayer a fieles y curiosos en uno de los actos singulares de la Pascua en la Vall de Segó.

La celebración de la eucaristía del Lunes de Pascua en el paraje natural que singulariza la subcomarca congregó la mirada de quienes año tras año viven este momento como la previa para disfrutar de un día de encuentro familiar o con amigos.

Una vez más, la bendición de las aguas del manantial que nutre la huerta de la Vall de Segó simbolizó el deseo de fertilidad, cuidado y protección que precisan las cosechas.

El acto se produjo después de que en Quart de les Valls se haya trabajado en la preparación del entorno de la Font. Y, a pesar que no se ha logrado concluir el proyecto de reconstrucción de los paelleros incluido en un Plan de inversiones de la Diputación de Valencia, el consistorio confía poder concluirlo antes del ejercicio actual. «Centenares de visitantes se han acercado a la zona del Molí de Vent y la Font. Quart ha mostrado su talante acogedor y hemos recuperado totalmente los festejos de Pascua» apuntaba Nestor Albert, alcalde de la localidad. 

El entramado de molins, sistars y sequies de la Font de Quart ha sido puesto en valor en diversas ocasiones; su reconocimiento como patrimonio hidráulico y valor histórico así como la singularidad de su funcionamiento componen un valor que se enfatiza con la presencia de numerosos visitantes a lo largo de estas fiestas de Pascua.

El Molí Nou de Quartell así como las diversas «Rutes de l’aigua» tramadas en paralelo al recorrido del agua componen un paisaje único que concluye en la marjal y ofrece una alternativa de disfrute medioambiental a cuantos se acercan a la Font durante estos días. 

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