Victoria luchada desde el banquillo

Un gol de Julio Insa en el tiempo de descuento de la segunda mitad dio la victoria al Atlético Saguntino (1-2) contra el Rayo Ibense. El partido de la tercera jornada de la Tercera RFEF estuvo muy disputado y los rojillos podrían haberse conformado con el empate, pero tiraron de ambición y decidieron dar un paso más para llevarse los tres puntos a Sagunt. Con este resultado, los romanos se encaraman a la zona noble de la clasificación, que empieza a apretarse al no haber equipos que hayan sumado los 9 puntos o que hayan perdido los tres encuentros. 

El conjunto rojillo fue el que tuvo el dominio del balón y el control del juego en Ibi, pese a que en los primeros 45 minutos estuvo más centrado en controlar al rival y no encajar. Después del paso por los vestuarios, los visitantes dieron un paso al frente y así llegó el primer tanto de Iván Bueno, casi a la hora de partido, con un disparo cruzado. La respuesta del Rayo Ibense no se hizo esperar y apenas dos minutos más tarde igualó la contienda. Cuando todo parecía que iba a quedar en un reparto de puntos, apareció Insa para desnivelar la balanza y dar el triunfo, además de una gran alegría, tanto a su equipo como a los seguidores. 

Esfuerzo

El entrenador saguntinista, José Reyes, reconoce que «la victoria sabe a esfuerzo y a querer más hasta el final. Son tres puntos más para un grupo de jugadores que luchó hasta el final. No puedo estar más agradecido con ellos».

El acierto en los movimientos desde el banquillo, una suerte más determinante desde que se permitieron los cinco cambios, hizo que una de las incorporaciones sobre el césped, Julio Insa, diera la victoria a los saguntinos. A este respecto, el míster apunta que «los cambios los hago con la intención de leer la mejor opción y el gol al entrar desde el banquillo no es más reflejo que su acierto y su gran trabajo. Él buscó la ocasión con el centro de Carlitos. El trabajo en el equipo solo nos refuerza».

El técnico del conjunto romano añade que «en la primera parte no es que estuviéramos espesos, sino conservadores. El equipo dominó parcela propia y media, pero no tenía profundidad. Estábamos como acomodados, jugando con las tablas tranquilamente y lo que les dije en el descanso, más que correcciones, fue que podían pasar dos cosas, seguir así y sacar un punto o dar un paso más y lograr los tres de la victoria», reconoce José Reyes.

Valentía

La clave del triunfo, según el entrenador del Saguntino, estuvo en «la segunda parte, cuando se vio un equipo más valiente, con más empuje, presencia en campo rival en el último tercio, con laterales más amplios. No es que habláramos nada técnico, sino que los jugadores dieron un paso al frente y decidieron ir a por ello».

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