Más de 200 personas se benefician ya en Sagunt de los itinerarios personalizados de Inclusión Social que presta el ayuntamiento desde el pasado 28 de septiembre.

Se trata, en su mayoría, de personas que reciben la Renta valenciana de inclusión, con un perfil variado, aunque abunda uno muy claro: El de las mujeres de 40 a 54 años, generalmente desempleadas que son la principal vía del sustento familiar pero ahora necesitan un apoyo para reinsertarse primero a nivel social y luego, en el plano laboral. "De momento hemos atendido a 130 mujeres y el resto, hombres", han explicado hoy responsables de los Servicios Sociales municipales al presentar esta iniciativa, denominada “Caminem per la inclusió”.

El objetivo, en todos los casos, es mejorar la capacitación y las habilidades sociales de las casi 600 personas de la ciudad titulares y beneficiarias de Renta Valenciana y quienes se encuentren en situación de vulnerabilidad y/o exclusión social.

A la presentación ha asistido el concejal de Servicios Sociales, Alejandro Sotoca, quien ha manifestado que este programa «es un instrumento para la integración adaptado a los diferentes perfiles de vulnerabilidad de las personas y unidades de convivencia que se encuentren en situaciones con dificultad de empleabilidad, con dificultades de inclusión que pueden derivar en aislamiento, situaciones de vulnerabilidad derivadas de cuestiones culturales o de crisis derivadas de causas diversas y que pueden comprometer su inclusión social o deteriorar su calidad de vida».

Este programa, que se integra en los Servicios Sociales de Atención Primaria Básica del ayuntamiento y está financiado por el Fondo Social Europeo, tendrá una duración de dos años.

Entre sus funciones, destaca, en primer lugar, abordar los factores y dificultades de carácter psicológico y social que dificultan a la persona o familia su inclusión social, entendida como un estilo de vida adaptativo y autónomo. También atender y orientar a las personas participantes con carencias sociales manifiestas y activar sus recursos personales, fomentando así su autonomía personal. Por otra parte, acompañar con el objeto de potenciar un empoderamiento de la persona participante, de forma que se implique activamente en el diseño y la evaluación de las distintas fases del itinerario.

Finalmente, otra de las funciones es la de facilitar todos los recursos posibles que sean provechosos para el desarrollo del itinerario y proporcionar la información que necesiten, facilitándoles los recursos oportunos para que adquieran los conocimientos y destrezas necesarias para su evolución personal y social.

De toda esta tarea, se está encargando una plantilla que cuenta con tres trabajadoras sociales, una de ellas con funciones de coordinación, dos educadoras sociales y tres integradoras sociales, con las que se han formado tres equipos de atención, 1 en el núcleo de Sagunt y 2 en el núcleo de Port de Sagunt.

Sotoca ha destacado, en este sentido, que «en Caminem per la Inclusió, la tutorización y el acompañamiento del Equipo de profesionales en todo el proceso es considerada clave para el desarrollo del itinerario, la consecución de los objetivos y la mejora de la calidad de vida de las personas participantes en el programa así como sus núcleos de convivencia».