El piloto español Marc Márquez (Repsol Honda) admitió que no puede pilotar su MotoGP como más le gusta por culpa de su hombro izquierdo, operado en diciembre y que en la segunda jornada de test en Sepang (Malasia) de este jueves le obligó a parar cuando empezó "a empeorar".

"Hemos rodado más o menos tanto como el miércoles y he probado algunas cosas nuevas, las más importantes para Honda. He empezado el día bien, pero entonces el hombro ha empezado a empeorar y hemos parado, para poder estar bien el viernes", expresó Márquez en declaraciones facilitadas por su equipo.

El de Cervera lamentó que no pueda "pilotar exactamente" a su gusto. "Normalmente soy un piloto que frena muy tarde y fuerte, pero todavía no puedo; tengo que hacerlo antes y más suave", subrayó el heptacampeón del mundo.

"En lo que respecta a la moto, nos hemos centrado principalmente en la salida de las curvas, pero a veces, en este circuito, el agarre cambia mucho", sentenció el piloto catalán.