Reducir los accidentes de tráfico es posible con tecnología e inversión

“Estamos en el ecuador de la segunda Década de Acción de Naciones Unidas por la Seguridad Vial, pero hasta ahora hemos sido incapaces de acortar la distancia que nos separa del objetivo de esta iniciativa global: reducir a la mitad la cifra de fallecidos en accidente de tráfico en 2030”.

Así de contundente se mostró el Presidente de la Asociación Española de la Carretera (AEC), Juan Francisco Lazcano, durante las Jornadas Nacionales de Seguridad Vial, que se celebrarón hace unos días en Alicante con la participación de medio millar de expertos de todo el país.

La AEC y la Asociación Técnica de Carreteras (ATC) sumaron esfuerzos una vez más para organizar este foro, uno de los más importantes de cuantos se celebran para debatir cómo reducir los siniestros viales y las consecuencias de los mismos. El objetivo, estudiar la seguridad vial con un enfoque 360 y definir las líneas de acción de futuro en este campo.

“Seguir insistiendo en políticas ya agotadas nos llevará, inexorablemente, al fracaso. Por eso, considero que, como profesionales del ámbito viario, estamos obligados a hacer hincapié en el terreno del debate público sobre la necesidad de recuperar el factor “seguridad” en el marco de nuestro sector”, insitió el Presidente de la AEC.

Y es que las cifras de siniestralidad en el conjunto de la Unión Europea, lejos de reducirse, vienen experimentando crecimientos más o menos sostenidos en los últimos años: en España, según los datos publicados por la Dirección General de Tráfico, en el primer trimestre de 2025 un total de 257 personas han fallecido como consecuencia de un accidente de tráfico. Son dos víctimas mortales más que en el mismo período de 2024, cuando se registró un crecimiento del 16% en el número de personas que perdieron la vida en accidente de circulación.

El Director General de la AEC, Jacobo Díaz, aseguró que el objetivo de las Jornadas era poner en valor el conocido como Sistema Seguro, que se basa en la incorporación a nuestras infraestructuras viarias de mucha más tecnología y más inversión: “el sector está preparado, con infinidad de productos, servicios y propuestas que pueden implementarse en nuestra red de carreteras para que los accidentes recuperen la senda del descenso”.

Carreteras indulgentes

En esta misma línea se pronunciaron otros de los especialistas que intervinieron en el Auditorio del Palacio de Congresos de Alicante. “Si la infraestructura puede perdonar el error humano, la infraestructura debe perdonarlo”, aseguró la Directora General de Infraestructuras de la Generalitat Valenciana, Mª José Martínez.

Los accidentes provocados por la irrupción de fauna en la vía, los que afectan a los peatones y ciclistas, así como a los motociclistas, y los derivados de la irrupción de los vehículos de movilidad personal, que aumentan de forma preocupante, especialmente en los entornos urbanos y periurbanos, protagonizaron buena parte de los debates. Los técnicos se mostraron optimistas porque existen soluciones tecnológicas que pueden ayudar a evitar este tipo de siniestros o a reducir las consecuencias más letales. La adaptación dinámica de los límites de velocidad, la señalización para el calmado del tráfico o los sistemas inteligentes de advertencia y canalización de animales en la calzada son solo algunos de los ejemplos que se han presentado.

En las sesiones que se se desarrollaron en la última jornada, protagonizaron los debates las conocidas como “carreteras indulgentes” -aquellas infraestructuras capaces de evitar que los fallos humanos desencadenen un accidente o que, si finalmente llegara a producirse, su resultado no sea el peor posible.

En este marco, se presentaron soluciones como las secciones 2+1, que disponen de tres carriles, uno para cada sentido de la circulación y otro central destinado a los adelantamientos y separado por una barrera física; los apartaderos (ensanchamiento de la calzada destinado a la parada de vehículos); barreras de seguridad y pretiles de última generación; señalización inteligente conectada con vehículos autónomos, o tecnologías como el cono conectado (sistema Smart de señalización de incidencias en la vía).

También se expuso cómo la IA ofrece herramientas que pueden mejorar la seguridad vial, profundizando en el concepto de Smart Roads, infraestructuras que utilizan sensores, cámaras, sistemas de comunicación y otros dispositivos para gestionar el flujo de tráfico, optimizar la iluminación, proporcionar información en tiempo real a los conductores y facilitar la recarga de vehículos eléctricos, entre otras funciones.

Se puede ampliar información en la web oficial del encuentro y en las redes sociales con la etiqueta #JNSV2025.