La fábrica de Tesla en Grünheide, cerca de Berlín, ya ha ensamblado sus primeras unidades del SUV Model Y. Tras recibir los permisos de las autoridades alemanas para producir, los primeros vehículos de la marca montados en Europa ya están en manos de sus compradores. Con este nuevo hito, Tesla se presenta en feudo rival, en un país dominado por Volkswagen, BMW y Mercedes-Benz. Es por eso que, Elon Musk, entregado al marketing, no pudo evitar visitar el país y realizar las primeras entregas personalmente, y bailando, para celebrar este nuevo paso de su empresa.

5.000 millones de euros y muchos dolores de cabeza, principalmente con los grupos ecologistas alemanes, le ha costado a Musk esta planta, clave en su estrategia de liderar el mercado eléctrico durante los próximos años. De hecho, hace más de ocho meses que debería haber estado operativa. Se entiende, entonces, el buen humor de Musk, que recibió en su fábrica a los 30 primeros clientes que se han hecho con un Model Y ‘made in Germany’. “Este es un gran día para la fábrica, otro paso en la dirección de un futuro sostenible”, pronunció el consejero delegado de la compañía tras bailar y bromear con los asistentes. Musk estuvo acompañado en la jornada por Olaf Sholz, canciller alemán.

Estas 30 unidades son parte de las primeras 2.000 que se han fabricado desde inicios de marzo, a un ritmo que irá ascendiendo hasta un máximo de medio millón anuales, una cifra que, como admitió el consejero delegado del Grupo Volkswagen, Herbert Diess, hace unos meses, supone más que doblar la producción de coches eléctricos de la industria alemana en 2020. De momento, la factoría de Grünheide solo produce el Model Y, un todocamino derivado de la berlina Model 3, aunque en el futuro llegarán más modelos.

También baterías

La gigafactoría de Tesla en Alemania también produce baterías, con una capacidad total de ensamblaje de 50 GWh anuales, lo que supondrá para la marca convertirse en el líder alemán y europeo en este campo, al menos hasta que el Grupo Volkswagen levante las seis plantas de baterías, entre ellas la de Sagunto en España, que pretende tener operativas esta década.

Esta fábrica ha creado, de momento, 3.000 lugares de trabajo, aunque se espera que la cifra alcance los 12.000 trabajadores en el momento en el que alcance su máxima capacidad productiva.

Con todo, la jornada estuvo marcada también por las protestas de varios ecologistas en la entrada de la fábrica. Cabe recordar que los permisos para iniciar la actividad de la planta tenían condiciones, ya que Tesla deberá cumplir estrictos objetivos relacionados con el uso del agua y las emisiones contaminantes en una decisión tomada por el estado federal alemán para contentar a los grupos ecologistas, que se siguen oponiendo a su funcionamiento.