La crisis por la que pasó el gobierno local de Compromís de Massalfassar cuando el alcalde, Carles Fontestad, retiró las competencias a su número dos (posteriormente se las devolvió) ha acabado pasando factura a la coalición. Fontestad pidió hace semanas la baja en el partido, tras 40 años de militancia en el nacionalismo, y ahora está impulsando una formación independiente para presentarse a las elecciones.
Según él mismo explica, durante el conflicto con su número dos, «nadie del partido» (en referencia a instancias supralocales) se puso en contacto con él para conocer su versión. Y posteriormente, cuando tras una mediación recapacitó y devolvió las competencias al edil, «tampoco han llamado para interesarse».
Por ello, asegura que un día hace semanas pidió la baja de Compromís y «tampoco hasta la fecha» ha tenido noticia. «Ni sé oficialmente si al final la han tramitado ni tampoco he recibido una llamada de agradecimiento por todos estos años de trabajo», asegura Fontestad, quien reconoce estar «dolido».
«Yo estoy en el partido de toda la vida. Ya estaba en la Unitat del Poble Valencià y luego en el Bloc. Siempre he militado en el nacionalismo. Nunca me movió interés económico porque a mí, como a otra gente, el partido me ha costado dinero. Y Compromís para mí era muy importante pero me han decepcionado. ¿Este es mi partido?», asegura el mandatario.
Respecto a su trayectoria, recuerda que en 2011 se ofreció al colectivo local «porque nadie quería liderar la lista» mientras que en 2015, asegura que su número dos, José Morant, «ya quiso ser él el candidato». En estos cuatro años, valora que no lo ha tenido fácil en el gobierno local. «Me han puesto muchas trabas unos y otros», explica.
Tras pedir la baja, dejó de facto el colectivo pero «allí queda todo el dinero de las aportaciones» que ha ido haciendo en la legislatura.Y esta misma semana ha recibido un escrito de sus excompañeros en el que le indican que ahora el grupo municipal de Compromís lo componen ellos. «Así es que en el próximo pleno, pasaré a ser concejal no adscrito», indica, una condición que apenas ejercitará un mes hasta las elecciones aunque conservará la alcaldía.
De cara a las elecciones municipales, está realizando ya movimientos para concurrir con una formación independiente. «La gente en el pueblo no entiende que haya pasado esto y la gente me anima», asegura. Actualmente aún valora si creará una agrupación de electores o si optará por registrar un partido local.
«Animo a las personas que quieran ir en mi lista a que contacten conmigo», indica.
