La Rambleta de València acogerá este fin de semana ‘Antígona, la historia de una mujer símbolo de lucha y determinación, en una versión contemporánea de la tragedia clásica universal de Sófocles.

Más de 2.500 años después de su estreno en Atenas, esta sigue siendo una de las obras de teatro más representadas en todo el mundo. De este modo, Antígona coloca la conversación en torno a la democracia, la justicia, las formas de gobernar, la libertad, la desobediencia civil, los derechos civiles, la rebeldía y la complejidad, a través de la historia de una mujer que desafió a Creonte, rey de Tebas, para enterrar el cadáver de su hermano Polinices, saltándose el edicto que lo prohibía. 

Coproducida por El Desván Producciones, el Festival Internacional de Teatro de Mérida y el Teatro Español, los espectadores podrán disfrutar los próximos 26 y 27 de febrero de dos funciones únicas en Rambleta. Se trata, así pues, de una reescritura contemporánea del autor y director mexicano David Gaitán, con un castellano moderno y cercano para el público que logra que el mito griego, muchos siglos después, nos siga resultando estimulante y de rabiosa actualidad.

La obra está protagonizada por Irene Arcos y Fernando Cayo, como Antígona y Creonte, respectivamente. Además, el reparto lo completan Clara Sanchis, Isabel Moreno, Antonio Sansano y Domingo Cruz. 

Irene Arcos y Fernando Cayo representan a Antígona y Creonte, respectivamente. ED

Democracia y libertad

Una ciudadana de Tebas -representada por Clara Sanchís- tiene la oportunidad de hablarle pública y directamente a Creonte, inteligente y vanidoso, por lo que ella busca la provocación exacta, esa que cimbre tanto el ego como el discurso. 

Su objetivo es lograr un debate público sobre la sentencia de muerte que recientemente impuso a Antígona por dar sepultura a su hermano. Para la ciudadana de Tebas que goza del beneficio de la tribuna, la acción de Antígona es un acto de desobediencia civil pacífica y amerita, por lo menos, una conversación amplia. 

Antígona sigue siendo una de las obras teatrales más representadas en todo el mundo. ED

La obra de teatro termina por ser un debate político salvaje, que pone en crisis el perfil tiránico de Creonte y la incuestionable civilidad de Antígona que el mito original habitualmente plantea.