Custodiados por El Cristo de Velázquez y acariciados por la música de Mompou, Lluís Homar y Adriana Ozores ponen voz y emoción a las palabras de San Juan de la Cruz: místico, poeta y hombre libre. Alguien muy crítico con el poder y la avaricia. El deseo de abundancia que gobierna el sistema es un mensaje incluso más válido en el siglo XXI. Homar, ahora director artístico de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, ha elegido su obra y su pensamiento para iniciar el ciclo Alma y palabra y dar a conocer a todo el mundo, con la colaboración del Instituto Cervantes, el patrimonio literario clásico español.