La pareja de Mimi y Rodolphe nos sumergen desde los primeros compases en un universo natural de veracidad que aún hoy nos resulta enormemente cercano. Ese aspecto, unido al de una orquestación magistral, convierten La Bohème en una obra maestra del genio de Lucca: Giacomo Puccini

Puccini, amante de los temas exóticos que inspiran Madame Butterfly y Turandot indagó con anterioridad a estas dos obras magnas una temática no muy alejada: los misterios de la vida libertina del París bohemio de 1830. Pintores, artistas, filósofos, enfermos… todas estas clases, a menudo desterradas de la ópera romántica de las décadas anteriores, constituirán durante los últimos años del siglo XIX una temática predilecta y, sin duda, La Bohème es un magnífico ejemplo de ello.