(Cap. II) Gilipolleces Migro Danza

Un "set de grabación" es el escenario de esta reveladora puesta en escena, mezcla de teatro físico y danza contemporánea.

Los protagonistas, cuatro personas representadas metafóricamente como "la cerda", "la rata", "el gato" y "la panda". Personajes con los que el espectador podría sentirse identificado. La representación del ser humano como el animal "evolucionado" siempre frustrado, egocéntrico, ¿racional?, histérico en ocasiones y fantasioso hasta el cansancio cuyo comportamiento se ve continuamente condicionado en actuaciones y opiniones de terceros y en absurdas situaciones sociales, políticas, religiosas, tecnológicas y mediáticas que los llevarán siempre al borde del colapso. Gilipolleces retrata la sociedad de lo absurdo, esa que se considera el eslabón superior.

Una puesta en escena que plantea un futuro no muy lejano, en donde lo que conocemos como "evolución" condiciona al ser humano asumiendo

comportamientos más cercanos al salvajismo. Personas que mutan en animales y viceversa. Un mundo irracional, incoherente, depresivo y vulnerable.

Ficha artística

Dirección general: Edu Migro

Coreografía: Creación colectiva

Intérpretes: Ana Rosa Manzanera, Dahiana Betancourt, Manel Ferrándiz y Edu

Migro

Música original: Branko Strahinja

Iluminación: Carles Sanchis

Escenografía y ambientación: Nataly Prada Ortega

Producción: Josep Navarro, Migro Danza

Agradecimientos: Centro Caterina, Le Coffre de Danza, La Fábrica de Hielo y Centro Danza María Carbonell.