Felix Grandet reina supremo en su modesta casa en Saumur, donde su esposa y su hija Eugenie llevan una existencia libre de distracciones. Extremadamente codicioso, no ve con buenos ojos a los pretendientes que se apresuran a pedir la mano de su hija. La llegada repentina del sobrino de Grandet, pone patas arriba la vida de la joven.