Proyección de la película "Este niño necesita aire fresco". Narra la historia de uno de los humoristas más apreciados de Alemania. La infancia de Hape Kerkeling, tal y como cuenta en las memorias en las que se basa el filme, estuvo llena de humor, pero al mismo tiempo estuvo marcada por experiencias dolorosas y traumáticas en la República Federal de los años 60 y 70. Su madre sufría episodios de depresión profunda y lo más difícil era hacerla sonreír, mientras que con su abuela mantuvo una relación muy especial. Desde bien joven intentó entretener a sus compañeros con divertidas parodias, pues se propuso hacer reír a todo el mundo tras el suicidio de su madre, cuando él apenas tenía ocho años de edad.