'Regresoal Edén de Paco Roca. Un viaje a la Valencia de posguerra', una exposiciónque aborda diferentes aspectos de la ciudadyde la vida cotidiana durantelos difíciles primeros años del franquismo. Unos años olvidadosque tuvieronuna enorme influencia enla Valencia de hoy en día.

Paco Roca cuenta la historia de su madre, Antonia, y a través de sus ojos disecciona con su lápiz una sociedad que sobrevive bajo el nuevo régimen impuesto tras la guerra. La muestra es una oportunidad para conocer aquellos años.

Después de otras exposiciones dedicadas al periodo republicano de la ciudad, esta exposición aborda la posguerra a través de la mirada del ilustrador Paco Roca y su conocida novela gráfica: 'Regreso al Edén'. En la exposición se pueden ver viñetas de Paco Roca y el proceso del artista para llegar al resultado: desde el boceto al color pasando por la tinta. A parte de esta sección de cómic principal, se podrá encontrar prensa, libros que sirven para contextualizar el periodo histórico e incluso personajes salidos del cómic que se hacen tangibles para situar al público en este contexto histórico.

La exposición se ha estructurado en nueve secciones: 'La fotografía y su poder de evocación', 'La familia de Antonia', 'Un nuevo régimen se impone', '¿Somos rojos?', 'Hambre y carestía', 'Una Iglesia aliada del Régimen', 'La mujer en el primer franquismo', 'La ciudad' y 'La evasión necesaria'.

En este cómic, el dibujante se sumerge, tras la pista de su madre a partir de una fotografía, en una ciudad que desvela con rigor. 'Regreso al Edén' va mucho más allá del relato sobre una joven humilde y su entorno familiar. El escenario donde discurre la narración, la ciudad surgida de la dictadura se configura como protagonista y cuenta su propia historia silenciosa. Solo hay que detenerse frente a las diferentes viñetas de "exteriores" y contemplar aquella urbe de los años 40 que aparece enmarcado a los personajes.

Los ojos de Antonia y la experiencia de su familia humanizan el relato y muestran cómo se vivía la dictadura franquista a pie de calle en un barrio de Valencia. El hambre y el estraperlo, el miedo a hablar, la prepotencia de una Iglesia aliada del régimen, la pérdida de derechos de las mujeres e incluso su maltrato aceptado, el hacinamiento causado por la falta de viviendas, las enfermedades agravadas por una nutrición deficiente, el trabajo precario y la aceptación de un destino que parecía la voluntad de Dios, conformaban la atmósfera que se respiraba aquellos años.