Expediente Warren, vecinos incómodos

El director James Wan aprovecha las últimas tecnologías para dar atmósfera de realidad a la ficción

Una escena de la película.

Una escena de la película.

Juan Luis Álvarez / Magazine

Le ha costado a James Wan lograr una merecida consideración como gran renovador del thriller de terror. El hacedor de la serie Saw, con millones de seguidores, que ha reventado taquillas y al final ha recibido el beneplácito crítico casi a regañadientes, recrea ahora una escalofriante historia con base real que fue recogida por los medios de comunicación norteamericanos a finales de los 70 y sirvió de base a filmes como Terror en Amityville (1979) o la icónica Poltergeist (Spielberg, 1982).

Expediente Warren recoge la experiencia de dos investigadores de fenómenos paranormales que fueron requeridos por una aterrada familia que vivía en una granja idílica pero con un grave inconveniente: los espíritus se paseaban por ella como Pedro por su casa.

Unos eran inofensivos, pero otros tenían un inequívoco pedigrí demoniaco que se expresaba violentamente. Wan aprovecha las últimas tecnologías para dar atmósfera de realidad a la ficción y ha elegido a tres actores de prestigio, con experiencia en el género.

Vera Farmiga, candidata al Oscar por Up In The Air y protagonista de La huérfana; Patrick Wilson, objeto de adoración sexual por Kate Winslet en Juegos prohibidos y cabecera de cartel de Insidious, y Lili Taylor, ubicada en el cine independiente, aunque ya tuvo sus más y sus menos con el más allá en La guarida hace una década.

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