'Zarafa': Un reto desigual

Es una historia infantil que reivindica los valores de la amistad, de la libertad y de la solidaridad a partir de un cuento ingenuo que utiliza como punto de partida un hecho real, la llegada a Francia de la primera jirafa, un verdadero acontecimiento. Lo demás, es decir todo lo que acompaña a esa circunstancia, desborda pura fantasía, exagerando a menudo todo lo que acontece.

Su mérito fundamental y digno de aplauso es que recurre en un entorno actual absolutamente desfavorable y casi hostil en el que la supremacía de las técnicas digitales en tres dimensiones se imponen de forma ostensible no sólo en Hollywood, donde la vertiente clásica representa ya una rara avis, sino en todo el mundo.

Esta producción franco-belga lucha contra corriente y lo hace con inusitado valor, asumiendo un gran reto financiero, con un presupuesto de 8 millones de euros, y apoyándose en un equipo técnico de 20 personas.

El riesgo ha sido excesivo, porque estas cosas pueden quedarse obsoletas demasiado pronto, aunque es cierto que ha contado con una base consistente, un relato encantador que llega a los niños y no disgusta a los adultos y una definición de los personajes y de los fondos realmente agradable.

Otro factor sorpresa es que en la dirección esté involucrado un cineasta como Remi Bezançon, sin experiencia previa en la animación, que se había entregado hasta ahora a un cine con personajes reales con títulos tan conocidos en España como ´Un feliz acontecimiento´ y ´El primer día del resto de nuestra vida´.

Nominada a los César galos de animación, tiene como factor de seducción más relevante el continente africano y toda la mitología que fluye de las tradiciones de las más arcaicas tribus.

El relato está contado por el venerable anciano de una de ellas, un verdadero pozo de sabiduría, y descubre a todos los pequeños que le escuchan la aventura que vivió Maki, un niño de 10 años, que se vio inmerso en un inesperado y asombroso viaje a París en Globo, acompañando al príncipe beduino Hassan, para proteger a su entrañable amiga Zarafa, una pequeña jirafa.