Las nécoras son uno de esos placeres del paladar que no todo el mundo puede permitirse y, aunque son habituales cuando se acercan las fechas navideñas, es entonces cuando más sube su precio y queda ya fuera del alcance del bolsillo de muchas familias.
Aún así, hay quien adora este marisco y, de vez en cuando, se concede este capricho. Si es así, te recomendamos que a la hora de comprarlas optes por las nécoras vivas antes que las que ya están muertas o congeladas. Es una forma perfecta de garantizar que el producto es fresco.
Si es tu caso, aquí tienes la receta para saber cómo puedes cocer las nécoras vivas y dejarlas en su punto para saborear su delicado sabor. Toma nota.
Cómo cocer nécoras vivas: la receta
- Lo primero de todo es llenar una olla grande con agua fría. En caso de que echases las nécoras vivas en agua hirviendo, este gesto haría que las patas de cada ejemplar se desprendiesen del cuerpo, algo que afearía la presentación final del plato.
- Si tienes a mano agua de mar, perfecto. Si no, puedes verter 70 gramos de sal por cada litro de agua. También puedes echar unas hojas de laurel en el agua, pero esto podría modificar un poco el sabor de las nécoras.
- Una vez con el agua fría con sal en la olla, echa las nécoras vivas en ella y pon la cazuela al fuego.
- Cuando empiece a hervir el agua, cuenta el tiempo: 7 minutos.
- Una vez pasado el tiempo, retira la olla del fuego y enjuaga las nécoras con agua fría y, si es necesario, vierte algunos cubitos para cortar de raíz la cocción.
Puedes degustar las nécoras calientes, tibias o frías, aunque lo habitual es esto último. Es un plato excelente como entrante y lo habitual es poner dos piezas por comensal.
