El periodo comprendido entre la Segunda República y la transición democrática fue uno de los más convulsos en la historia de Ontinyent, una de las ciudades más importantes del país durante la época medieval y moderna. Durante la Segunda República, la ciudad vivió una intensa actividad política, social y cultural en la que se pusieron de relieve una serie de ideas e intereses —a menudo contrapuestos— que marcaron su dinámica hasta el comienzo de la Guerra Civil. 

Después del golpe de estado de 1936, Ontinyent quedó en la retaguardia republicana hasta el final de la guerra. Finalmente, pocos días antes del final de la guerra, Ontinyent pasó a manos del bando sublevado: empezaba entonces la dura posguerra y los primeros años de la larga dictadura franquista.

Ontinyent pretende acercar la memoria democrática al gran público. A.O.

A día de hoy, Ontinyent todavía guarda algunos vestigios de aquellos años que marcaron el devenir de la ciudad y que, ahora, constituyen los itinerarios de la nueva ruta de ‘Memoria Democrática’ impulsada por el Ayuntamiento de Ontinyent, con el patrocinio de la Diputació de Valencia.

Esta iniciativa surgió a principios de año como respuesta a la gran demanda de visitas guiadas a los refugios antiaéreos del Regall, Tortosa y Delgado, recientemente recuperados por el consistorio.

Esta iniciativa surgió a principios de año como respuesta a la gran demanda de visitas guiadas a los refugios antiaéreos del Regall, Tortosa y Delgado, recientemente recuperados por el consistorio. «Los refugios son elementos de nuestra historia que habían acontecido en espacios sin uso con el paso del tiempo, pero que con su recuperación son aprovechados con éxito en las numerosas visitas guiadas que venimos organizando», explicó la regidora de Turismo, Sayo Gandia, durante la presentación de la nueva ruta.

De este modo, la nueva ruta de ‘Memoria Democrática’ pretende acercar la memoria de esos años al gran público mediante recursos turísticos y con un carácter pedagógico. Así pues, el itinerario plantea un recorrido cultural por distintos espacios urbanos y edificios de la ciudad que tuvieron una especial relevancia durante tres periodos reseñables en la historia de España: la Segunda República, la Guerra Civil y los primeros años del régimen franquista.

Refugio antiaéreo de la Guerra Civil. A.O.

En conjunto, este itinerario cultural trata de poner en valor los principales aspectos políticos, sociales y culturales de estas etapas históricas a la ciudad, dar a conocer acontecimientos relevantes que ocurrieron en estos años y mostrar la localización de elementos singulares: sedes sindicales y políticas, instalaciones educativas y culturales, hospital militar y centros sanitarios, residencias de acogida de refugiados, fábricas y industria de guerra, centros de detención y otros espacios de represión y por último, los diversos refugios antiaéreos construidos durante el conflicto bélico.

El itinerario consta de 12 puntos, en cada uno de los cuales los usuarios pueden encontrar un panel con una breve información indicativa de los lugares de especial interés más próximos a cada punto. Cada panel incluirá un código QR que dará paso a una información ampliada en la página web de Turismo Ontinyent, dónde también se podrán visualizar fotografías de la época y documentación histórica.

Un repaso a la memoria democrática de Ontinyent

La ruta de ‘Memoria Democrática’ arranca en la Iglesia arciprestal de Santa Maria, que sufrió ataques por parte del anticlericalismo arraigado en algunos sectores de la izquierda obrera durante los días posteriores al golpe de estado de 1936.

Durante la Guerra Civil, algunas fincas rurales del término de Ontinyent fueron confiscadas y convertidas en colonias escolares destinadas a acoger niños refugiados de distintas zonas de España.

El segundo punto de la ruta recorre la avenida de la Revolución —rebautizada así con el inicio de la Guerra Civil—, una de las principales arterias de la ciudad que conectaba el centro de Ontinyent con la estación de ferrocarril y contaba con varios edificios relevantes y algunas fábricas y viviendas.

Edificios de Ontinyent acogieron colonias escolares durante la guerra civil. A.O.

Durante la Guerra Civil, algunas fincas rurales del término de Ontinyent fueron confiscadas y convertidas en colonias escolares destinadas a acoger niños refugiados de distintas zonas de España. Este es el tercer punto de la ruta, que también visitará algunas industrias de armamento y espacios de represión franquista.

Los usuarios pueden encontrar en cada ubicación un panel con una breve información indicativa de los lugares de interés más próximos.

La siguiente parada se detiene en el Xalet de les Boles, habilitada como hospital de sangre durante la Guerra Civil. Además, su jardín ejerció como uno de los lugares de reparto de comida durante los meses en que se tuvieron que aplicar medidas de racionamiento.

A continuación, los usuarios pueden descubrir algunos de los espacios más emblemáticos de cultura y política popular, que incluyen la Plaza de Santo Domingo, el Teatro Echegaray, el Cinema Onteniense,la Casa Sanz o el antiguo edificio de La Previsora, entre otros.

Entrada a uno de los refugios. A.O.

La ruta llega a mitad de camino en la carretera de Albaida —actual avenida de Ramón y Cajal—, que albergó durante este periodo algunas fábricas textiles y diferentes establecimientos.

La séptima parada dirige a los usuarios hasta la Plaza de la Concepción, que fue testigo de la primera manifestación en apoyo al nuevo régimen tras la ocupación franquista de la ciudad.

La octava parada conduce al antiguo hospital militar de Ontinyent, un lugar donde prestaron servicio durante la Guerra Civil «las mamás belgas», un grupo de 23 enfermeras de distintos países cuya historia se recuperó en un documental que ha sido proyectado en toda Europa. 

El siguiente punto de la ruta es la calle de Josep Melcior Gomis, dedicada al compositor ontinyentí a quien se le atribuye la autoría del Himno de Riego, que se convirtió en el himno oficial tanto de la Primera como de la Segunda República.

Visitas guiadas a los redugios antiaéreos. A.O.

El tramo final de la ruta recorre las viejas calles del Arrabal, un conjunto de calles céntricas de Ontinyent que contaban con numerosas casas señoriales, centros sociales, tiendas y algunos talleres que fueron confiscadas al inicio de la Guerra Civil.

Uno de los últimos puntos de la ruta se detiene en la fábrica de Tortosa y Delgado, que fue la fábrica más grande de Ontinyent durante los años 30 y cuya producción fue destinada a cubrir necesidades bélicas durante la guerra.

La ruta termina en el centro político de la ciudad: la plaza de la República que, durante la guerra, fue el lugar donde llegaban los niños y niñas refugiados y evacuados para ser acogidos en régimen familiar.