La estatua denominada La Hembra del Mar, de Juan Ripollés, indica la entrada al Planetario, un foco de divulgación de la ciencia y del entretenimiento para ciudadanos y turistas desde su inauguración, en 1991. De hecho, su programa de actividades es muy completo y variado.

Situado al comienzo del Paseo Marítimo del Grau, destaca por su cúpula blanca de 25 metros y por las exposiciones que hay a su alrededor. El Péndulo de Foucault da la bienvenida.

Situado al comienzo del Paseo Marítimo del Grau, destaca por su cúpula blanca de 25 metros y por las exposiciones que hay a su alrededor.

En esa misma planta hay salas de exposiciones, conferencias y de proyecciones, así como el centro de información de la Reserva Natural de las Islas Columbretes. La sala del Planetario está dotada con un proyector «Carl Zeiss» controlado por ordenador para incorporar a la sesión efectos especiales y hacerla más amena.