RUTA:   

Km. 00,00 (WP 1, 305, 702715E-4205973N): La ruta se inicia en el restaurado complejo ferroviario de Torrevieja convertido en parque de ocio, con césped, pinos, palmeras, una fuente, bancos para descansar en tranquilos rincones, un parque infantil situado al lado de un quiosco de madera donde se pueden comprar golosinas, helados o sentarse a tomar algo.

Además, la explanada de vías ha sido transformada en zona de patinaje; el edificio de la antigua estación, con unos arcos interiores realmente preciosos, se ha rehabilitado como Centro de Conferencias y Sala de Exposiciones, frente al cual se ha vuelto a extender un trozo de vía. Las tres naves adosadas que servían de almacén, albergan ahora el Museo de la Habanera, con una exposición de recuerdos, fotografías, placas y galardones del maestro Ricardo Lafuente Aguado, creador de numerosas habaneras y actual director del Coro y Orquesta «Salinas de Torrevieja». La caseta de los servicios de la estación sigue siendo utilizada como servicios.

El parque, con todo su perímetro enrejado a excepción de uno de sus laterales, que queda delimitado por el Canal del Acequión, que une el Mediterráneo con la laguna salada de Torrevieja, permanece abierto desde las diez de la mañana hasta las diez de la noche, a excepción de la época estival en que cierra sus puertas a las dos de la madrugada.

Fuera del recinto del parque, y tras cruzar la calle Urbano Arregui, se encuentra el inicio de la Vía Verde Acondicionada, el antiguo almacén de mercancías que se ha acondicionado como Centro de Interpretación de la Industria Salinera, mostrándonos la historia y la interrelación de la industria salinera con su pueblo; y la antigua cochera, donde dormían y eran reparadas las locomotoras, que ha sido rehabilitada para convertirse en la sede de la Asociación Alzheimer de Familiares y Amigos de Torrevieja. Como curiosidad, diremos que ha sido desplazada hasta allí, ya que originalmente se encontraba justo al revés, con las dos puertas, altas, anchas y con el clásico dintel curvado, pegadas al terraplén de la carretera de circunvalación.

Tras pasar bajo la carretera, aparecerán a un lado chalets y al otro, las enormes montañas de sal de unas salinas que ya fueron explotadas por fenicios y romanos, y que los torrevejenses se encargaron de comercializar allende los mares, como fue el caso de la isla de Cuba cuando era colonia española; de ahí las populares habaneras.

En la actualidad, las lagunas saladas de Torrevieja y La Mata son un Parque Natural, en su mayor parte de propiedad estatal, muy visitado por los flamencos y único refugio en la zona para las aves acuáticas durante el período de caza. En los primeros kilómetros, y coincidiendo con el tramo que atraviesa varias urbanizaciones, la explanación se ha dividido en un doble carril, uno asfaltado para las bicicletas, y otro para los pea- tones, tipo acera con un curioso enlosado multicolor.

Km. 03,35 (WP 2, 30S, 702155E-4209094N): El asfaltado, ya algo bacheado, termina y da paso a un firme de tierra compacta, poco antes del inicio de un extenso cañaveral que se prolonga a lo largo de más de 500 metros, al término del cual una malla metálica nos separa de la laguna de agua salada más grande de Europa, con sus siete kilómetros de longitud, 25 de perímetro y más de 1.400 hectáreas.

Km. 04,78 (WP 3, 30S, 701310E-4210254N): Llegaremos a un hueco en la alambrada que nos permitirá acceder a los márgenes de la laguna. Se puede uno acercar a la orilla del lago a disfrutar de una visión más cercana de la lámina de agua, y tocar la sal que ha quedado depositada sobre la playa de tierra roja. Incluso, hasta jugar sobre la bicicleta a esquivar los secos matorrales de salicornias, juncos, saladillas y senecios, trazando complicadas curvas con lo que mejoraremos nuestros reflejos, eso sí, con el riesgo de terminar en el salitroso suelo.

Km. 06,59 (WP 4, 30S, 700157E-4211653N): Fin de la Vía Verde Acondicionada de Las Salinas, coincidiendo con el Garden Center Valentín y el cruce con la carretera asfaltada que se dirige a la pequeña población de Los Montesinos. Con precaución, cruzaremos la carretera y seguiremos sobre el trazado de la explanación, bastante irregular y repleta de piedras, que tras 180 metros de recorrido, mejora al convertirse en un sendero, y 220 metros más adelante, al transformarse en una pista de tierra

07,95 (WP 5, 305, 698956E-4212233N): Tras pasar ante una enorme balsa de agua, llegaremos a la altura de un campo  en el que para el vallado del terreno se utilizaron las traviesas de madera de la vía, en las que todavía permanecen atornilladas las placas metálicas de asiento de los raíles.

Km. 09,05 (WP 6, 305, 698628E-4213241N): Llegaremos bajo el paso superior de la carretera conocida como «Calle del Canal de los Riegos de Levante», que enlaza la urbanización de Ciudad Quesada con la de El Ducado de la Herrada. A partir de aquí, el trazado de la explanación, aunque sigue estando transitable a lo largo de otros 250 metros, queda cortado ante el vallado de una nueva urbanización, así que, en éste punto nos daremos media vuelta para regresar a Torrevieja pero esta vez contemplando el paisaje desde una perspectiva diferente.