Cada vez que veo una diva del pop subida al escenario del Dolby Theatre, me acuerdo de esa escena de «El guardaespaldas» en la que Whitney Houston era salvada por Kevin Costner. Era una época, los 90, en la que el actor además de reventar la taquilla con la malograda voz condenó a demasiados niños de España a ser bautizados con su nombre.

En el caso de Lady Gaga en la reciente fiesta del cine global, podría haberse lanzado en su ayuda Bradley Cooper, sobre todo para resguardarla de las reticencias de la parte intelecto-cinéfila de quien no concibe el binomio estrella del pop y celuloide. Pero a Stefani Joanne Angelina Germanotta, que así se llama de verdad, no le hace falta porque se basta y se sobra ella solita para reinar como estrella rara en un mundo que sobrevalora la normalidad. La cantante se ha ganado el derecho a ser actriz porque parece que se le dan bien las dos cosas. En «American Horror Story» ya se intuía y en «Ha nacido una estrella» ha hecho honor al título. A quien no le agrade puede repetirse esa sentencia que lanzó estatuilla dorada en mano, digna de ser estampada en una taza de Mr. Wonderful. «No se trata de ganar, de lo que se trata es de no rendirse». Esa es la máxima de quien lleva la extravagancia por bandera y se la echa en cara al globo entero, con el aval del éxito conseguido a base de diferencia. Si Gaga fuese una canción en español más que su «hit» «Alejandro» sería «A quién le importa».

Hace tiempo que la vi y la ya oscarizada «Shallow» no sale de mi cabeza, porque la mejor canción de los Oscar, que evidentemente no fue la de Queen con Adam Lambert, es el nuevo «I Will Always Love you» del siglo XXI, pero acompañada de mejor calidad interpretativa en las escenas a las que pone banda sonora. Ella no es la primera, Whitney, Mariah, Celine o Madonna han ganado estatuillas con sus canciones, la última por «Evita» de Alan Parker, pero a pesar de un Globo de Oro por su interpretación, a la Academia de Hollywood le pudo el prejuicio y como actriz no se la nominó. Se lo merecía porque de «Who's that Girl» a Evita Perón hay un mundo de calidad.... Lady Gaga es la evolución de las estrellas de antaño porque es las dos cosas: diva en el canto y en la pantalla.