Una de las series más populares de Netflix de los últimos días es 'Desaparición en el Hotel Cecil' una inquietante serie documental que narra la desaparición de una joven estudiante canadiense en el hotel del centro de la ciudad estadounidense de Los Ángeles.
La plataforma de series y películas ha lanzado una mini serie de cuatro capítulos en la que se muestra la cronología de la joven Elisa Lam, que fue de viaje en 2013 por el Estado de California y de la que se pierde la pista en el hotel del downtown de Los Ángeles.
El misterio de su desaparición queda reflejado en un terrorífico vídeo que muestra las últimas horas de la joven canadiense antes de evaporarse durante más de 15 días. Las incógnitas alrededor de este caso parten de las imágenes escalofriantes de la mujer en el ascensor del Hotel Cecil que fue difundido por la Policía de Los Ángeles para pedir la ayuda ciudadana ante la impotencia de los investigadores de llegar a una conclusión.
Qué ocurre con Elisa Lam
Lam, nacida en Vancouver en 1991 decidió tomarse unos meses sabáticos por la costa Oeste de los Estados Unidos. Con su plan de viaje baja el brazo escogió el céntrico hotel, el el que permanecería desde el 26 de enero hasta el 31, cunado se dirigiría a la ciudad de Santa Cruz. Un viaje que nunca llegó a realizar.
Dos días sin recibir una llamada de su hija, alertó a los padres de la muchacha, que decidieron ponerse en contacto con las autoridades para denunciar su desaparición. Las investigaciones les llevaron a visualizar las imágenes de la cámara de vigilancia de uno de los ascensores del hotel. Y lo que vieron les estremeció.
La grabación, de cuatro minutos de duración, muestra cómo Lam se sube en el habitáculo y empieza a pulsar varios botones del panel. A continuación, permanece de pie junto a una de las paredes esperando a que se cierren las puertas del ascensor, algo que nunca ocurre. Al cabo de unos segundos, se asoma al exterior de forma brusca y mira hacia ambos lados asustada. Vuelve a entrar al ascensor y se arrincona con la intención, al parecer de esconderse de algo o de alguien que está fuera.
Durante otros angustiosos segundos, Lam continúa pegada en una esquina del ascensor hasta que decide asomarse de nuevo por unas puertas que siguen sin cerrarse. Se asoma hacia la derecha. Finalmente decide dar un paso y salir al pasillo. Con una actitud extraña realiza unos pasos titubeantes y, dirigiéndose hacia la izquierda, desaparece de plano. Tan solo se ve parte de su ropa y de un brazo.
De nuevo, Lam entra en el ascensor y vuelve a marcar erráticamente los botones, para de nuevo salir del ascensor. En ese momento se aprecia cómo gesticula de forma extraña y se le pierde la pista.
Durante 30 eternos segundos, en el vídeo no ocurre nada cuando de repente, pasa algo desconcertante: se cierran las puertas tal como deberían haberse cerrado de forma normal. Algo que no ocurre en los más de tres minutos en los que Elisa Lam espera.
