'El comodín de La 1' atraviesa una buena racha en TVE. Aunque empezó con mal pie en las tardes de la televisión pública, el concurso ha ido mejorando poco a poco sus datos de audiencia y ya se posiciona como una de las ofertas más potentes del canal en la mencionada franja. Además de entretener, el programa también lanza mensajes importantes como el de Lola, una de las concursantes de ayer. 

"Ahora me dedico a vivir lo más tranquila posible. Ya estoy jubilada, he sido técnico de turismo y he trabajado en hoteles y en agencias de viajes", comenzó explicando antes de revelar lo que haría con el premio: "Lo quiero para comprar una casita prefabricada. Pero pequeña, pequeña. Que quepa yo y poco más, es suficiente. Me apetece tener ese sitio para relajarme y leer, la cosa más sencilla del mundo". 

En la penúltima pregunta, Lola comentó que también utilizaría el dinero "para complementar y estar un poco más tranquila", ya que definió su pensión con una contundente palabra: "Es ridícula". "Antes se trabajaba pero no te daban de alta, entonces mi pensión es muy cortita. Esto me viene muy bien", confesó ante Aitor Albizua

El presentador, por su parte, destacó que muchas espectadoras podían sentirse identificadas con ella: "Cuantas mujeres que seguramente nos están viendo dirán: 'A mí me ha pasado exactamente igual'. Y ahora mismo te están mandando toda la suerte del mundo". "Dios quiera y que me manden energía", apuntó Lola. 

Finalmente, gracias a sus conocimientos y a los comodines, la concursante terminó su paso por el programa de la mejor forma posible: llevándose 30.000 euros, el premio máximo que se pone en juego en cada entrega. "Estoy súper emocionada, no sabes lo que he tenido que luchar", aseguró Lola al borde de las lágrimas.